Algunos usos externos:
? Utilizando lo ungüento o compresa en la zona afectada calma inflamaciones dolorosas como reuma, artritis o gota; pues es ligeramente analgésico. También se utiliza para hematomas, contusiones y torceduras.
? Obtendremos excelentes resultados si queremos combatir hemorroides, los furúnculos y la erisipela; colocando sobre la parte afectada un algodón o compresa, empapado con la infusión.
? Aplicando una loción con el jugo extraído por presión de las hojas tiernas, cura y desinfecta heridas, quemaduras, rozaduras o sabañones.
? Al lavarnos la cara con una infusión conseguiremos disminuir y hasta eliminar las manchas de la cara y los granos.
? Las hojas quemadas se han empleado como insecticida y la infusión de las hojas se empleó como repelente de mosquitos y, rociada sobre las plantas, para protegerlas de pulgones y orugas.
Vamos al jabón:
* Ingredientes: aceite de Oliva, aceite de Coco, manteca de Cacao, manteca de Karité y cera de abeja. Infusión de flor de Saúco seca (cargada) e hidróxido sódico. Azúcar. Aceites Esenciales de Lavanda, Patchuli y tintura de Benjuí.
Concentración 28%
Sobreengrasado 8%
* Técnica: Firulillos
* Colorantes: Dióxido de Titanio una pizca para aclarar el propio color del jabón.
Podéis ver otro jabón de Saúco aquí