Por cierto, una gran duda que tenemos mis hijos y yo es el porque del triunfo de las muñecas sin boca. Tras mucho meditarlo (el tema no es para menos), hemos llegado a la conclusión de que como estas muñecas no necesitarán dentista ni ortodoncia son mucho más económicas a la larga ( y si no que le pregunten a cualquier madre o en su defecto, a los dentistas y ortodoncistas). En realidad son facilísimas de hacer, ya que sólo hay que modificar ligeramente el patrón base de cualquier muñeca que tenga las mismas proporciones, al igual que hice con Cleo de Nile (lo podéis ver en esta entrada). Lo más complicado y laborioso es hacer el pelo, que lleva mucho tiempo y paciencia (he estado a punto de dejarla calva de harta que me tenía el dichoso pelo).
Por si os gustan las proporciones de mi muñeca os pongo el patrón en mi blog, MADRES HIPERACTIVAS. .