Este faldón tiene historia, y no porque sea una gran obra de arte que se vaya a grabar en la retina de nadie, sino por el tiempo que tardó en estar terminado, digno de la mejor catedral.
Pretendía ser un jubón, pero se quedó a medio camino. Demasiado cortito. Desde luego sirvió para aprender la lección de que no se pueden seguir las instrucciones de una revista "a medias". La revista indicaba usar agujas del número 2.5, y está hecho con el número 2. Por llevar la contraria, mas que nada... jejeje
Así que al ver que el resultado no era el esperado, fue castigado al fondo de una bolsa, de la que no saldría en mucho tiempo. Al final, una buena amiga, cansada de preguntar por él y no obtener respuesta me regaló un pedacito de tela para hacerle un faldón, y así darle una segunda oportunidad convirtiéndolo en vestido.
Contentísima (porque la tela de patitos me encanta y porque mi amiga es un sol) me puse manos a la obra. Rematé el jubón, pero después de tanto tiempo la lana ya no apareció, así que no pude hacer ni capota ni patucos a juego. Mecachis... Tratando de arreglarlo (porque hay que tener el conjunto completo) hice la falda más corta para poder sacar tela para hacer la capota. Y claro, luego me parecía super corto... un gran error.
Y entre eso, y que al fruncir la tela me quedaba una costura gordísima en la cintura, el proyecto de faldón fue castigado nuevamente al fondo de otra bolsa. Y ahí se quedó, por lo menos un año más.
Hasta hace muy poquito tiempo, que después de ver faldones hechos de esta forma en el blog de Majosé y en el blog de Flor y de preguntarle a las artistas como habían hecho, me propuse terminar el mío.
Además estoy en "plan limpieza" y me voy a obligar a mi misma a terminar todo lo que tengo a medias (que son unas cuantas cosas...) y usar las telas y materiales que tengo en casa antes de comprar nada más.
Y bueno, el caso es que después de tanto tropiezo, está terminado.
Al final no lo hice fruncido, solo le hice dos pliegues a cada lado intentando concentrar la tela en los laterales para conseguir que tenga más vuelo en esa zona. Porque el jubón es cruzado detrás, y cruza muchísimo, y creo que esta es la forma de aprovechar más la tela (que era escasa) para que abra más la falda abajo.
Lleva un gran lazo en la cintura (como veis en las fotos las lazadas no son lo mío) y puede ser atado delante o detrás. A mi creo que me gusta más atrás, porque delante se come el dibujo central, pero queda bonito de cualquier forma.
Y a la capota le hice ese "invento" para atarla. Utilicé un bies de raso porque ya no me quedaba tela para hacerlo en piqué, y le metí en medio la puntilla. Quizá (cuando sepa para quien será...) lo corte para hacer que se cierre abotonando a un lado. Pero aún así... ¿qué os parece mi invento?
¿Os gusta? Yo estoy contentísima, sobre todo por haberlo terminado.
Un besiño
Fuente: este post proviene de Feito e Punto, donde puedes consultar el contenido original.
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