Además de acercarte a este barrio para conocer lugares emblemáticos como el Madison Square Garden o el Empire State Building, no dejes de callejear para tomar un brunch y hacer alguna compra.
Comenzamos nuestra ruta en el centro de información. Deberás alejarte un poco para ver la gran aguja hilando un botón gigante que intenta camuflarse entre los rascacielos. Este es el punto de encuentro para los tours organizados pero si quieres visitarlo de forma más relajada en este kiosco de información te facilitarán un mapa con las tiendas y restaurantes más destacados. Si eres amable puedes conseguir un souvenir gratis, a nosotros nos dieron un metro de bolsillo, no es gran cosa pero es un recuerdo de este Fashion District que nos hizo ilusión llevarnos.
Justo al lado del kiosco puedes hacerte una foto con la escultura "The Garment Worker" de Judith Weller, representa un hombre judío cosiendo a máquina a modo de homenaje para todos los trabajadores de diferentes etnias que han trabajado durante años en este distrito.
En esa misma avenida denominada Seventh "Fashion"Avenue podemos pasear por el Fashion Walk of Fame donde descubrimos grabados algunos de los nombres más relevantes de la moda para el país. Este paseo de la fama es el único monumento del mundo de la moda estadounidense. Para aprender más acerca de las personas que hicieron posible que Nueva York se convirtiera en la capital de la moda de fama mundial puedes caminar por las siguientes reseñas.
Mientras paseas por las ajetreadas calles de este distrito podrás descubrir tiendas de todo tipo, desde talleres de diseñadores emergentes hasta tiendas especializadas en cremalleras donde únicamente venden este material. Os recomiendo una parada obligatoria en M&J como he bautizado "el Pontejos neoyorkino" pero, siguiendo el estilo de esta ciudad, es una mercería a lo grande. A la entrada te facilitan un carrito de la compra a modo supermercado para que vayas guardando todas las compras... imaginaros el inmenso muestrario de botones, hilos, abalorios, puntillas, encajes, bisutería y un gran etc que podéis encontrar.
Las tiendas de tejidos también son habituales en este distrito. En general los precios son elevados pero si callejeas puedes encontrar algunas ofertas. Si buscas algún tejido en concreto esta es tu zona porque muchas de las tiendas son especializadas en un material concreto, habituales son las de pieles o cuero, y también en telas elásticas adaptables para un vestido de fiesta como para los trajes de las patinadoras sobre hielo.
Si nos alejamos de este distrito también podemos encontrar multitud de tiendas craft. Entre ellas la que más me gustó fue Purl Soho, en el mismo barrio que da nombre a la tienda.
La tienda tiene una decoración sencilla pero muy colorida donde se respira un ambiente acogedor de gusto por lo artesanal. Las dependientas te animan a ver todo su muestrario y se interesan en saber si eres un aficionado a la costura o cual es tu próximo proyecto para ver de qué forma pueden asesorarte.
Nada más entrar me sorprendió ver una devanadora de madera en forma de paraguas para ovillar madejas de lana de manera totalmente tradicional. Tengo que confesaros que he tenido que consultar el nombre de este artilugio que no veía desde hace unos cuantos años.
Además de una gran variedad de coloridas lanas tienen un panel con telas muy originales que venden por metros. Para los más indecisos tienen una cesta con algunos retales que no pude resistirme a comprar.
Estas son solo algunas pinceladas del mundo de la costura que puedo contaros pero seguro que nos quedan muchas por descubrir.
Después de leer este post puede que te plantees comenzar a hacer las maletas para visitar Nueva York dentro de poco :)