¡Hola bonicas!
Hoy os traigo un diy de esos fáciles pero que a mi personalmente me gustan un montón. En casa todavía tenemos unas cuantas paredes vacías, esperando que algún día me dé por imprimir fotos y colgar marcos. Aún así, quería darle un toque diferentes con algún tapiz hecho por mi, ya fuera con telar, de ganchillo o macramé.
Cómo os estoy preparando otro post para haceros vuestros propio telar casero (y así voy practicando) hoy toca el de macramé. Tenía muchas ganas de probar a hacer uno y quería empezar con algo fácil, así que he aprovechado un poco de hilo de macramé que tenía en un color amarillo precioso para ver qué tal iba la cosa.
A parte del hilo que queráis usar, también necesitaréis una caña, rama, madera o lo que sea para poder colgarlo después y unas tijeras.
Primero cortaremos las tiras de hilo. Las mías son de aproximadamente unos 3m cada una, pero eso también dependerá de como de largo lo queráis.
Doblamos cada hilo por la mitad y con la parte que queda unida, hacemos un nudo para ponerla en nuestra caña.
Ahora empezaremos con los nudos. Para hacer este tipo de nudo, necesitaréis 4 cabos. Cogemos el de la izquierda y lo pasamos por encima de los dos del centro y por debajo del cabo de la derecha. Y hacemos todo lo contrario con el cabo de la izquierda (por debajo de los dos centrales y por encima del de la derecha)
Ahora apretaremos hasta tenerlo dónde más nos guste y justo debajo haremos otro igual (tal como veis en las fotos de abajo)
Seguimos haciendo lo mismo cogiendo de 4 cabos en 4 cabos hasta llegar al final. Para la siguiente vuelta, haremos exactamente lo mismo pero cogiendo los 4 cabos a partir del tercero, los dos primeros y los dos últimos de todo el tapiz no los usaremos.
Así conseguiremos que se vayan entrelazando todos los hilos.
Ahora solo queda seguir haciendo nudos hasta dónde queramos.
Cuando ya no queramos hacer más filas de nudos, remataremos las colas de hilo que han quedado abajo. Las podéis hacer todas rectas, en diagonal, o cómo más os guste!
Por último, ataremos un hilo más fino en la caña por los dos extremos para poder colgarlo y solo tendremos que escoger el lugar perfecto para ponerlo!
Cómo este que he hecho, se trataba de aprovechar restos de hilo, no ha quedado muy muy grande, por eso el siguiente que haga quiero que sea mucho más grande y con más hilos y nudos diferentes.
La verdad es que me encanta lo mucho que llena la pared y la luz que le da al salón, así que tengo muchas ganas de seguir probando nudos nuevos!
Y vosotras, ¿Tenéis algo de macramé por casa?