Mi pimer proyecto DIY es un cojín suelo para niños , realizado con dos salvamanteles del papel trenzado y un poco de lana. Cómo señalo en el título de este post, habrá una segunda parte dónde os mostrare otro cojín, hecho con el mismo tipo de salvamantel, podéis verlo aquí
Para este cojín necesité dos salvamanteles (o individuales) redondos que imitan la fibra natural pero que en realidad son de papel. Los compré en las rebajas de Zara Home (en la nueva temporada lo siguen manteniendo). Opte por este tipo de material porque es muy fléxible y se puede coser a máquina. El único inconveniene que tiene este tipo de material (ya sea de fibra natural o como este que la imita) es su limpieza. Este, en concreto no se puede mojar. Las recomendaciones de limpieza son parecidas a las que requieren las fibras naturales. De vez en cuando, hay que pasarle la aspiradora para quitar el polvo. Y si lo que queremos es quitar algún mal olor que haya podido coger, espolvoreamos bicarbonato por todo el cojín, dejamos que actúe durante 10-15 minutos y después le pasamos la aspiradora.
Más abajo, os muestro fotos de otro modelo que también he confeccionado, el cual podemos utilizar en la terraza, jardín, zona chill out…
En cuanto al tipo de lana que utilicé para hacer los pompones, combiné dos colores y grosores diferentes. Vosotr@s podéis escoger la opción que más os guste.
Comenzamos con los materiales necesarios para realizarlo:
2 salvamanteles de fibra de papel. Estos son de 38 cm. de diámetro.
Lana de diferentes colores (opcional). 2 madejas de 75 gr.
Tijeras.
Hilo.
Relleno de cojín.
Máquina de coser (opcional, también se puede coser a mano).
Lo primero que haremos será unir los dos salvamanteles, con un zig-zag ancho. Dejamos un trozo sin coser para poner meter el relleno.
Pasamos ha hacer los pompones, borlas… (es opcional, queda también muy bien si no le ponemos nada). En esta ocasión opte por utilizar el método del respaldo de la silla, porque eran 18 unidades. Consiste en enrollar el hilo alrededor del respaldo de una silla (las vueltas dependerán del espesor que queramos darle a nuestros pompones). Una vez que tenemos el grosor deseado, atamos fuerte y aseguramos con un doble nudo (yo até cada 6 cm. la blanca y cada 7 cm. la rosa), dejando unos 15-20 cm. de hebra, que será la que utilicemos para coserlos al cojín. Sacamos nuestros bucles del respaldo y cortamos por la mitad (entre las dos ataduras). Terminamos recortando e igualando.
Una vez que tenemos todos los pompones, sólo hay que coserlos al cojín. Medí linealmente y dividí en 18 partes. Como se aprecia en la imagen, los fijé por el interior con una aguja de coser lana (tambíen podéis hacer esta parte al final del proceso). Por último, metí el relleno y cerré la abertura con un zig-zag a mano.
Et voilà, ya tenemos hecho nuestro cojín suelo para niños con dos salvamenteles de papel trenzado. ¿Qué os ha parecido? ¿A qué ha quedado muy bien?
Esta es la foto del otro modelo de cojín para el suelo, realizado con el mismo tipo salvamantel. Sólo cambié su forma a rectangular y no le añadí, como se aprecia en la imagen, ningún tipo de adorno.