Si te gusta el washi tape seguro que no te sorprenderás de ver la gran cantidad de modelos diferentes que podemos llegar a tener. Seguramente ya te habrás ingeniado algún sistema para tener tus cintas de washi tape siempre a mano. Hoy te dejo algunos de los ejemplos más fáciles y originales que he encontrado por la web.
Dispensador de pared
Una barra para colgar los rollos, un poco de imaginación y cintas de colorines. Poco más necesitas para llevar a cabo estos dispensadores de pared. El soporte en el que pongas la barra puede variar mucho y será lo que marque la originalidad del dispensador. Me gusta mucho la idea de usar un marco para colgar la barra. En las fotos hay hilos, pero es un sistema genial para las cintas washi.
Si no te quieres complicar la vida con el bricolaje, clavar clavos, poner una barra horizontal que se pueda extraer fácilmente para cambiar las cintas fíjate en estas últimas fotos que aprovechan cajas para colocar las cintas de modo que se vean bien y sean fáciles de coger. Ideales para colgar en la pared junto a tu mesa de manualidades.
Dispensadores verticales para washi tape
Si es grande como el de la foto de la izquierda lo puedes colgar en la pared, pero también son ideales para tener sobre una mesa.
En la foto central vemos cómo han aprovechado una caja de vino para atravesarla con palos y en ellos colgar las cintas. La foto de la derecha es de un soporte para tazas reutilizado para guardar tus cintas decorativas. Buena idea.
Un buen sistema son los portarollos de madera para el papel de cocina, en ellos puedes introducir muchas cintas. Si quieres puedes inventar tu propio sistema con una madera a la que incorporas varias columnas de madera en las que poner las cintas.
Un escurridor de madera para vasos puede tener la misma finalidad que el soporte para tazas de antes: guardar tu washi tape.
Cajas para washi tape
Una simple caja de plástico o madera se puede convertir en un dispensador de washi tape con una barra de la medida de la caja o una de esas barras telescópicas que usamos para poner cortinillas. Busca las más pequeñas que encuentres y una caja que te guste.
Otra opción es usar la caja en la que viene el film de cocina que ya lleva su portarollos. Solo tendrás que decorarla para que quede más bonita. Por supuesto con washi tape.
Si no te quieres complicar la vida buscando una barra, puedes usar divisores hechos de madera o cartón para formar compartimentos en los que disponer las cintas. Para usar una de ellas sólo tendrás que sacarla. Es un modo de guardarlas y de que sean todas bien visibles para poder seleccionar la más adecuada en cada momento.
Otros soportes originales para washi tape
Antes hemos visto un colgador de tazas, un escurridor de vasos… ahora te enseño un organizador de cápsulas de café, en espiral, al que en lugar de nespresso han puesto washi tape.
Otra opción muy recurrente es usar una percha para colgar las cintas. Si la usas de madera puedes soltar la barra de abajo y meter las cintas para volver a cerrar con un clavito.
Si la percha es metálica, córtala y luego la enganchas de nuevo con un poco de cinta.
Para escribir este artículo nos hemos inspirado en:
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