Un año más llega el día del padre, ese día que todos los padres están esperando que llegue porque es su día por excelencia. Es un día de agradecimientos, felicitaciones y regalos en el que papá es el protagonista. En casa después de estar dándole vueltas a que podríamos regalarle nos hemos decidido por hacer nuestro propio regalo, este año va a ser un regalo handmade o lo que es lo mismo un regalo hecho por nosotros mismos, una lámina con acuarelas.
Las acuarelas han sido el descubrimiento del siglo para mi pequeño diablito, desde que las ha descubierto no hay quien le quite el pincel (parece que ha heredado mi vena de artista, jeje) de modo que pensé “¿por qué no hacer una lámina con acuarelas como regalo para el día del padre?” dicho y hecho, se lo dije a Marc y éste encantado, además como estamos decorando nuestra nueva casa nos va a venir de perlas para algún rinconcito.
No hace falta que tu peque sepa escribir ya que la que lo va a escribir vas a ser tu para que, después él, lo repase con el pincel y las acuarelas. No te preocupes si no lo repasa perfectamente ya que en las imperfecciones está la gracia.
¿Quieres ver como lo hemos hecho? pon atención que seguro que te gusta, además el valor de este regalo superará con creces el valor de cualquier regalo que hayas comprado, te lo aseguro, a papá se le va a caer la baba.
A continuación te explico el paso a paso para realizar la lámina con acuarelas para el día del padre, pon atención, es muy sencillo y queda muy chula, ya verás.
Los materiales que necesitarás son los siguientes:
-Una cartulina blanca (el tamaño dependerá de lo grande que quieras que sea tu lámina).
-Acuarelas.
-Pincel.
-Un folio (para hacer nuestro boceto).
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Una vez tenemos reunidos todos los materiales necesarios vamos a empezar haciendo nuestro boceto. En mi caso he elegido una frase “Papa eres mi héroe” que define a la perfección lo que es papá para Marc, porque para él papá tiene súper poderes, sube al tejado de casa, corre muy rápido y se sube a los árboles, jeje yo me meo de risa.
Cogemos el lápiz y plasmamos en el papel lo que queramos que aparezca en nuestra lámina. Cuando tengamos claro como queremos que sea nuestra lámina ya lo podemos pasar a la cartulina.
Fijamos la cartulina a la mesa con unas tiras de washitape para que no se nos mueva.
Consejo: no aprietes mucho el lápiz en la cartulina, intenta que sea un trazo fino, para evitar que después de pintar con las acuarelas se vea la línea del lápiz.
Hasta aquí nuestra colaboración en el regalo para el día del padre, ahora le toca al peque. Ha llegado el momento de que coja el pincel y empiece a repasar lo que hemos dibujado o escrito con las acuarelas.
En esta fase del proceso hay que tener mucha paciencia y dejar hacer al peque. yo he estado varias veces al puntito de cogerle el pincel, por lo menos para guiarle. Al final lo ha terminado y ha quedado de maravilla y ¿sabes lo mejor de todo? que le ha encantado, incluso se ha quedado con ganas de más.
Una vez terminada la lámina solo hace falta enmarcarla (esta fase es opcional ya que la puedes colocar en la pared directamente con washitape).
Este es el resultado
¿Qué te ha parecido esta idea como regalo para el día del padre?
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Una lámina con acuarelas para el día del padre
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