Me da gusto compartir con ustedes este camino de mesa que he elaborado en tonos terracota y beige y sobre el cual he bordado a mano unas pequeñas mariposas en los mismos tonos. Seleccioné las telas en degradé desde el más oscuro al más claro y para el orillo un bies o sesgo en color café.
Hice una secuencia de fotos del proceso, no es un tutorial, porque considero que el tutorial debe contener muchas explicaciones en el paso a paso para que cualquiera independientemente del nivel de conocimientos que tenga sobre el patchwork lo pueda realizar. Es sólo para dejarles la inquietud y generarles interés en hacerlo, si alguna desea con mucho gusto le daré las indicaciones que hagan falta.
Es fácil de elaborar, pero se debe tener mucho cuidado en las medidas, en el corte y en el armado para que se vea lindo y sobre todo para que todos los cuadritos coincidan en sus esquinas.
Inicialmente corté las telas seleccionadas en tiras de 8 cms que al unirlas de acuerdo al diseño quedan aproximadamente de 6 cms de ancho. Una vez unidas, o cosidas a lo largo, las corté en forma transversal, nuevamente de 8 cms.
Planché las costuras hacia el mismo lado, de tal modo que al desplazar los colores para formar el diseño, la primera fila quedara con las costuras hacia la derecha y la siguiente fila con las costuras hacia la izquierda. Esto con el fin de facilitar que las esquinas donde se encuentran cuatro cuadros, queden perfectamente alineadas.
Fijé con alfileres cada pieza a la siguiente para evitar el desplazamiento al coser y asegurar que todos los puntos de encuentro quedaran en su posición.
Con mucha paciencia cosí todas mis tiras transversales hasta obtener el diseño completo y procedí a cortar los excesos en los bordes, dejando el margen de costura suficiente en el orillo.
Una vez emparejados todos los bordes, quedó listo para realizar el bordado.
Para pasar el dibujo a la tela utilicé la caja de luz, si no disponemos de una, podemos utilizar cualquier otro método tradicional para realizar esta labor.
Por supuesto no podía faltar la foto donde mi lindo gatito se dispone a echar una siesta sobre el camino de mesa, quizá atraído por el calorcito de la caja.
Aquí podemos observar como la luz de la caja, facilita el paso del diseño a la tela. Además vemos con mayor claridad la alineación de las costuras.
Olvidé sacar la foto de la caja de luz, otro día se las mostraré, aunque su diseño es totalmente artesanal es de gran utilidad para estas labores.
Utilicé hilos argelinos en los mismos tonos de las telas para el bordado, son un poco más gruesos que los hilos utilizados para bordar en punto de cruz. Me decidí por la puntada de cadeneta para hacer el bordado pues me parece que facilita mucho las puntadas en las curvas.
Después de realizar el bordado, coloqué la guata y el forro al camino y realicé un acolchado lineal a máquina. Hice una costura en zigzag en el borde y cosí el bies o sesgo en la trasera o lado posterior. Escogí un sesgo café unicolor para enmarcar el camino. Al dar la vuelta al sesgo hacia adelante, el borde quedo cubierto y cosí a mano con puntada escondida.
Las esquinas quedaron alineadas y los bordes parejos.
Y unos cuantos días después... entre partido y partido del mundial y entre triunfo y triunfo de mi selección... tan... tan!
Me encantó el resultado, me parece delicado, sobrio y elegante. Yo, se los he contado en otras ocasiones, soy adicta a los tonos tierra, desde los beige hasta los café oscuros, pero igual creo que se vería bonito en cualquier gama, amarillos, verdes, azules... o una combinación de ellos. Cuál escogerías?
Abrazos y Feliz fin de semana!