Se puede decir que se trata de un pequeño acto de reciclaje, ya que he aprovechado una chapa que tenía en casa de propaganda de una conocida marca de ron que regalaban en la Feria de Sevilla (regalaban la chapa, no el ron, que conste...). De ahí su dibujo tan folclórico ;-).
Esta es la chapa en cuestión:
Pues usando cinta adhesiva de doble cara, camuflé a los dos flamencos y me quedó el siguiente broche:
Así cuando me llevo el bolso de crochet, me adorno la camiseta de turno con este broche y queda muy conjuntado.
Y como le cogí el gustillo a esto de los broches, me hice otro para una camiseta azul que me había regalado Nuria para mi cumpleaños y así queda aún más mona de lo que ya era de por sí.
Espero que os haya gustado. Ahora estoy con otros broches, esta vez realizados con trozos de manta polar Polarvide de IKEA, que ya os enseñaré cuando le haga sus correspondientes fotos. Como véis, tenemos IKEA hasta en la sopa ;-).
Saludos y hasta la próxima entrada
Fuente: este post proviene de Día Tras Día, donde puedes consultar el contenido original.
¿Vulnera este post tus derechos? Pincha aquí.
Creado: