Este verano ha sido un buen año de amapolas y las he disfrutado en mis idas y venidas a Burgos y Valladolid, asi que un día en el mercadillo de Medina encontré esta tela y nada más verla dije "Me la quedo" Tuve claro que iba a ser una colcha muy veraniega para la cama, pero puesta eran demasiadas amapolas, así que como ahora se llevan las colchas combinadas y tenía una blanca que se había quedado un poco corta, lo solucioné así.
La he dejado un poco más larga porque esta en mente cambiar la cama y ahora son más largas, asi que la doblo abajo, pero tenía razón un buen amigo decorador, nunca cortes impulsivamente, déjalo unos días y si de verdad no te gusta lo cortas, que luego no tiene remedio, pues eso, que tenía razón que ahora me gusta doblada abajo como si fuera una mantita.
Probando bordados en unas toallas.
Más amapolas
Para alguien especial
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