En las tapas he utilizado un papel infantil que me encanta, con ositos, muñecas y un caballito. Elegí unas anillas en color rojo oscuro que destacan el encuadernado y que al ser de un diámetro grande permitirán poner pegatinas gruesas sin abombar las tapas.
La primera página es una cartulina de alto gramaje con fibras incrustadas, en la que he añadido un ex-libris troquelando cartulinas y escribiendo el nombre de la propietaria con un rotulador de purpurinas y relieve.
Para el interior he utilizado unos acetatos blancos que permitirán apreciar mucho mejor las pegatinas y facilitarán la tarea de despegarlas para cambiarlas de sitio (cosa muy habitual en los niños...).