¿Ya tenéis todo preparado para esta noche? ¿Habéis adelantado mucho en la cocina esta mañana? Mmmmm, sólo de pensar en el banquete que me espera luego se me hace la boca agua
Bueno, a lo que iba, que empiezo a hablar y me voy por las ramas. Hoy vengo con unas pequeñas pautas para aprender a regular la tensión de la remalladora. En mi caso utilizaré la remalladora Silvercrest que ya os he enseñado en ocasiones anteriores.
Lo primero que hay que hacer es lo más básico de todo (y que nadie hace), leerse las instrucciones de cabo a rabo. Tenemos que entender el funcionamiento de la remalladora e identificar las funciones de las palancas, tuercas y demás botones.
La remalladora silvercrest viene además con un DVD bastante completo donde nos enseñan cómo se utiliza la remalladora, cómo se enhebra, los distintos tipos de costura que podemos realizar? después de verlo, guardadlo bien porque es bastante práctico.
Si esta es la primera vez que utilizas una remalladora, recomiendo empezar a hacer pruebas con costuras de 2 hilos. Una vez que domines este tipo de costura podrás avanzar y experimentar con la de 3 y 4 hilos, sucesivamente.
Las prisas no son buenas y si empezaras directamente con la costura overlock de 4 hilos y las tensiones estuvieran muy desfasadas, al cabo de un rato más de una desconectaría la remalladora, la guardaría en su caja y utilizaría una costura zigzag para hacer los acabados. Vamos a evitar esto en la medida de lo posible. Ya veréis que en cuanto aprendáis a usar vuestra remalladora se convertirá en un elemento imprescindible.
Después de leer las instrucciones y aprender a enhebrar la máquina, nos iremos al manual y elegiremos una costura de 2 hilos, colocaremos la lanzadera, instalaremos una sola aguja y regularemos la remalladora y las tensiones conforme al manual.
Una vez reguladas las tensiones, cortamos un trozo de tela y probamos en la máquina.
Muchas veces el derecho de la costura quedará bien pero si le damos la vuelta veremos que el revés ha quedado mal. (En la imagen vemos el revés de las costuras, la que queda por encima, con la lazada terminando en el filo de la tela, tiene bien ajustadas las tensiones y la que está por debajo, donde la lazada se queda en medio del margen de costura, tiene las tensiones mal ajustadas).
Si esto nos sucede, miraremos los dibujos que trae el manual e identificaremos cuál de las opciones se asemeja más a lo que nos ha ocurrido. Al lado de cada dibujo vienen varias soluciones, en mi caso me aconsejaba elevar la tensión del hilo amarillo o bien reducir la del hilo azul.
Procedí conforme a las instrucciones, elevé la tensión del hilo amarillo y volví a probar.
A veces no se consigue a la primera y hay que hacer pequeños ajustes antes de conseguir que las tensiones estén bien reguladas, pero si partimos de las indicaciones del manual y observamos lo que falla en la costura no nos llevará mucho tiempo.
Como veis las tensiones correctas para esta tela son distintas a las aparecen en el manual pero eso no significa que las nuestras estén mal.
Después de un par de intentos la costura quedó bien tanto por el derecho como por el revés.
De esta manera también regularemos las tensiones para las costuras de 3 y 4 hilos. Si hemos comprado la misma tela en distintos colores, podemos apuntarnos en una libreta las tensiones que nos han funcionado, pero tened en cuenta que cada vez que vayáis a utilizar la remalladora con un tejido distinto, habrá que regular las tensiones conforme a la tela.
Ahora sí que sí chic@s… ¡OS DESEO UNA MUY FELIZ NAVIDAD! Que lo paséis genial y que todos vuestros sueños se cumplan. Nos vemos muy pronto por aquí.