1. Un libro: cualquiera de los nuevos de Delipapel puede ser una buena idea para cualquier familiar/amigo/hijo que le gusten las manualidades. Ya me pareció una idea estupenda cuando me lo comentó María, pero si además los libros van ilustrados con fotografías de Silvia de Na Lua Dulce, entonces la combinación no puede ser mejor. Hay una colección de cuatro, yo los combinaría en plan pack (que no me gusta a mí nada un pack...) el de Chalk Paint con un par de pinceles, pinturas, unos sellos...
2. Algo para decorar: Uno de los letreros de 613 Materika, estos personalizados con el nombre son perfectos para decorar una habitación infantil, pero también para fiestas, mesas de dulces, comuniones... Aunque, la verdad, todo lo que hace es tan bonito, que cualquiera de sus productos sería un buen regalo.
3. Un juguete: Este barco de tela de Sweet Scandinavia me parece perfecto para los más peques, pero es que los juguetes de tela son una de mis debilidades... Mis hijas ya son mayores, pero los que aún estéis a tiempo...
4. Un peluche: Cualquiera de los de Bag, que son una maravilla y además acaba de estrenar web. Desde que la descubrí en el blog de Bea, con sus peluches hechos a partir de los primeros calcetines del bebé, me quedé enganchada a su trabajo. Y ahora que la conozco, tengo que decir que la persona que está detrás es incluso más encantadora que sus muñecos :-)
5. Algo más de decoración: Hace meses descubrí las lámparas de La Vaca Lucera en un post de Bebybo, y desde entonces tengo una en mi wish list. Son lámparas de madera preciosas, con un toque boho, hechas a mano con mensaje personalizado, ¿qué más tendrían que tener para ser el regalo perfecto?
6. Y todavía algo más decoración: Porque nadie se puede resistir a los cojines de Amayadeeme, toda su colección es tan estupenda que me ha costado mucho decidirme por uno sólo para la foto. Todo lo que hace, sus láminas, sus guirnaldas, sus cojines con formas, merecen mucho la pena.
Esas son mis seis ideas de esta semana y mi recomendación de tienda (física) con encanto es Kamchatka, en el barrio de las letras, porque siempre tienen cosas tan bonitas que es imposible no pararse en su escaparte y porque además no pueden ser más amables. Y por supuesto, para los que no estáis en Madrid, siempre está la opción on line, y los que sí estáis, la encontraréis en la calle San Agustín 18.
Fuente: este post proviene de So Sunny, donde puedes consultar el contenido original.
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