Hoy se celebra el cumpleblog numero 4 de Anuskalandia, que tiene a su talentosa autora y maestra de la goma eva, Ana lanzando una gran celebración basada en un trabajo con temática Disney, con técnica y materiales, libres.
Habiendo tanto que ya pertenece a Disney, había mucho de donde escoger. Pero me deje ir con el tema de moda: Aladdin.
No he visto aun la nueva película con actores reales con Will Smith como el genio y basada en la anterior animada con el genial Robin Williams. La película animada me encanto en su tiempo, sobre todo el genio de la lampara y el dueto de Aladdin y Jasmine sobre la alfombra mágica. Pero mi verdadera pasión por Aladino comenzo hace mucho tiempo atrás, cuando era niña.
En mi niñez no había videocasettes, esos llegaron después cuando llegue a la adolescencia. Así que ver una película implicaba ir al cine. Y vaya que tuve suerte, porque mis papas nos llevaron al cine a ver todas esas películas de Disney, algunas mas de una vez.
Pero verlas mas de una vez (porque las volvían a repetir de vez en cuando en las salas de los cines) de todos modos no era cada semana. Así que no era como hoy que los peques pueden ver la misma película mas de 40 veces con el DVD o Netflix, al grado que se aprenden los diálogos, no es asi?
Para mi hermana y para mi, sin embargo, existían los LPs. Porque en esa época Disney lanzo una colección de Discos de vinilo que incluían el cuento narrado con las voces y canciones de las películas.
Lo maravilloso es que había muchos cuentos mas de los que Disney no había hecho película, pero que también pertenecían a la colección y estaban narrados por la misma compañía traductora que en México hacia los doblajes.
Y vaya que teníamos un tesoro precioso, entre esos LPs estaban el de Cenicienta, Blancanieves, La Bella Durmiente, Robin Hood, 101 Dalmatas, El dragon de Eliot, Winnie Poo, Peter Pan, El libro de la Selva, Los Tres Cerditos, Los aristogatos, La Dama y el Vagabundo, Pinocho, etc.
Como les decía, también estaban esos cuentos que aun no habían sido lanzados en película y que incluso nos hacían especular a mi hermana y a mi sobre cuando las harían como Hansel y Gretel, Caperucita Rojas y otros.
Uno de mis favoritos era el LP de el audiocuento de Aladino y la Lampara Maravillosa, bajo la licencia de Disney, narrado por Jose Manuel Rosano y con las voces en los personajes del genial Francisco Colmenero, Arturo Mercado y Maria Santander. Además tenia la preciosa música de Sherezade de Rimsky-Korsakov entreverada en el fondo. Era una versión hermosa y muy diferente de la animada de Disney con Robin Williams y me imagino que de la nueva versión con Will Smith.
Le cuento a mi hija que poníamos a tocar los discos y a leer el cuento o imaginarnos las aventuras en nuestra mente y ¡Ah! A veces mi hermana y mis primos jugábamos haciendo teatro moviendo la boca y actuando los personajes o usando títeres, no solo de este cuento de Aladino sino de todos los otros que teníamos. ¡Que tiempos tan lindos!
Recordando esa linda infancia donde se usaba mucho mas la imaginacion, llego a la celebración de Ana llamada ¡Vamos a Disney! con Aladino, con la lampara maravillosa.
Les confieso que la idea de la imagen fue inspirada por muchas que hay en la red, pero tratando de ser aunque sea un poco original hice mi propio dibujo y use una de mis técnicas favoritas: Acuarela pintada sobre pegamento negro.
Ilustración de La Lampara Maravillosa de Aladdin con Pegamento Negro
Materiales:
Papel para acuarela Canson (9 pulg X 6 pulg)
acuarelas en tonos: Violeta, Magenta, Azul Ceruleo, Azul Marino, Azul primario, Ultramarino, amarillo cadmio, naranja, rojo
pincel del numero 8
lápiz
Pegamento negro (dar clic al enlace para ver como se hace)
picadientes (palillo de dientes, mondadientes)
pintura acrílica blanca, dorada y glitter
cepillo de dientes viejo
marcador permanente negro
Procedimiento:
1.- Corte mi papel canson en un rectangulo de 9 pulg X 6 pulg y le puse cinta adhesiva en las orillas para pegar sobre mi superficie de trabajo.
2.- Trace mi dibujo tratando de hacerlo bajito sin recargar el lápiz.
3.- Mojamos con el pegamento negro la punta de un picadientes y delineamos lo que queramos que tenga esa orilla negra. Dejamos que seque bien antes de continuar.
4.- Ahora la parte divertida, pintar en diferentes puntos al azar con acuarela y pincel grueso del 8, usando los diferentes tonos de azules, violeta y magenta por toda la superficie del humo que sale de la lampara, dejando que se mezclen un poco entre ellos. Pintar la lampara con tonos amarillos y naranjas. Deja secar bien.
5.- Repetimos regresandonos en el humo de la lampara con los mismos tonos sobre los anteriores para que quede mas oscuro y vibrante nuestro fondo porque si no, no parecerá el cielo de noche y deja secar. Luego vuelve a repetir. En total pinte 3 veces, pero es importante que entre esas veces no te desesperes y dejes que todo se seque muy bien.
6.- Ahora tapamos con un papel la lampara, mojamos las puntas de un viejo cepillo de dientes con pintura acrilica blanca y salpicamos para simular las estrellas. Tambien me regrese y con un pincel mas fino, del numero 1, hice mas puntitos. Deja secar.
Luego revise si no hay puntos sobre el relieve negro del pegamento y los cubri con un sharpie negro. Tambien le di una ligera pasada con dorado en las sombras a la lampara y con un poco de pintura con glitter unos toques para realzarla.
7.- Una vez seco el trabajo, podemos poner esta ilustración en un marco, que yo quiero tener en el cuarto de la tele, tengo planeado hacer varios mas para decorar. Espero poder mostrárselos mas adelante.
Y ahora los invito a ir al blog de Anuskalandia para ver las creaciones de Ana y de todos los que estarán presentes con sus trabajos en esa celebración. Muchas felicidades Ana y gracias por el certificado!
Fuente: este post proviene de Pegostes y Colores, donde puedes consultar el contenido original.
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