Estoy a un par de posts en convertir esto en un blog únicamente navideño, de verdad que me veo como la Mariah Carey de los blogs en plan All I want for Christmas is DIY.... (sorry!! juego de palabras horrible.... podéis dejar de leer que me lo tengo merecido :-). Lo que pero está claro que la navidad es mi momento más activo del año, imagino que la cantidad de horas que pasamos en casa tendrá algo que ver, o que somos muy de verbena y las luces nos parecen bien siempre, como a Mariah... lo dicho...
Hoy os traigo una versión nueva de la guirnalda facilísima navideña que ya hicimos hace cuatro años (¿os acordáis? la de la foto de abajo...¿cómo ha pasado el tiepo tan rápido!!! cuatro años!!) y que me apetecía mucho repetir, pero con una versión más rústica, un poco más nórdica y como siempre sin salir de mis clásicos de la navidad: rojo y gris.
Si tenéis muchas tardes con niños en casa y os apetece dar uso a esos botes medio vacíos de chalkpaint que todos tenemos por casa, sólo necesitaréis unas rodajas de madera (estas son de la tienda Casa, pero las hay en mil sitios), un poco de pintura y lana (o algodón, o fieltro...) y una buena play list navideña (nosotras tenemos una en Spoty pero advierto que hay un poco de todo...)
El tutorial no cambia del de 2014 (cuatro años!!! de verdad?!), pero esta vez hemos añadido lana en vez de pintura en la barba ¿por qué? pues porque hace unas semanas fui al taller de Fruto Samore de manta XXL (que recomiendo completamente) y de la manta súper mega amorosa que me traje a casa sobró un trocito de lana que no iba a quedar desaprovechada.
Y por otro lado, en vez de dejar corazones en las rodajas sin Santa, he aprovechado para escribir alguna frasecilla navideña como las miles que circulan por Pinterest.
Los agujeros se pueden hacer muy fácilmente con un punzón, y se pueden unir con cualquier cinta bonita que tengáis en casa, yo he utilizado baker y una guirnalda de estrellas que compré hace años y sigue durando.
Y ahí está por ahora, porque como seguimos sin árbol (en Madrid) los adornos se van moviendo por toda la casa por aquello de conseguir un poco de ambiente navideño y la verdad es que estamos a un paso de competir con Cortilandia, con Vigo no, que ya sé que es imposible.
Las fotos finales no son las mejores, pero ya sabéis, las horas de luz juegan en mi contra en esta época, pero en cuanto pueda os la enseño algo mejor, que luce más de lo que parece. Y mientras, a seguir escuchando a Mariah...