¿ Ha vosotros no os ha pasado alguna vez que empiezas a trabajar algo, sin saber que resultado os va a dar?.
A mí si, muchas veces, y hoy es una de ellas.
A partir de un cordoncillo rojo y un papel decorado precioso de margaritas, fui poco a poco haciendo y dejándome llevar por lo que se me iba ocurriendo...
... Y este es el resultado: un bonito cuaderno de dibujo.
Es evidente que el cordoncillo rojo, me inspiraba una encuadernación de cosido, y así lo hice.
Con papel de dibujo de alto gramaje, perfecto para acuarelas, preparé unos cuadernillos cosillos con el ya famoso y bonito hilo rojo
y todo lo demás fue surgiendo poco a poco...
Un encuadernado con cartón corrugado marrón, le dio un aire masculino que me encanta.
Cartulinas rojo granate, como parte de la decoración de la parte exterior y como guardas de la parte interior.
Un papel con motivos florales, que ya tenía de hace tiempo, y no se a que casa corresponde, fue la otra parte inspiradora del proyecto, tanto el anverso como el reverso con esos banderines.
La parte interior, un bolsillito troquelado con una troqueladora de Artemio ( no se si tiene nombre); una tag muy muy vintage, de Fashionista Collection de Grafic 45
y un dibujo de una blonda realizada sobre la guarda con una máscara casera, le dan ese toque especial sin aportar volumen
La parte trasera es sencilla con este precioso papel. Y todo el conjunto adornado con estos brad con forma de tornillos, que me parecen de lo mas divertido.
Todo el entintado está realizado con Distress Black soot, y los bordes de las hojas interiores con Distress Aged mahogany.
Y bueno hasta aquí la historia de mi cordoncillo rojo, espero que os haya gustado.
Un saludo!!
Fuente: este post proviene de Blog de Ovillar, donde puedes consultar el contenido original.
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