Asi que casi siempre tienen una segunda oportunidad, y a veces hasta la tercera.
Uno de esos días con cosas que hace tiempo que rondaban por casa, surgió esté conjunto.
El inicio fue con este bote (aquí ya decorado) pero que estaba hecho una pena y era feo de narices. Lo tenía abandonado y listo para tirar. Pero fuí indulgente.
Lo forré con esta tela de lino o algo parecido, le hice unos stencil en el cuerpo y la tapa, le añadí unas puntillas de remate y un lacito hecho con la misma tela que lleva una de las piezas.
Seguí con otra vieja caja de puros que había en casa y que era como todas las cajas de puros....
Siguiendo el estilo del bote, la forré de la misma manera. Además, me iba muy bien, puesto que estas cajas tienen varios grabados en la madera que dificultan otro tipo de decoración.
Utilicé las mismas plantillas que en el bote, un bies de cuadros, puntillas y algún adorno floral.
A continuación le tocó el turno a este estuche para botellas. Era de cartón y feo a más no poder, así que le dí el mismo tratamiento que a los anteriores pero esta vez utilicé dos telas. La de base igual que en los otros dos trabajos y la de cuadros que imita a los viejos pañuelos roperos o pañuelos fardo. Completé con el bies de cuadros y un bordado recortado de una muestra de antiguas cortinas.
Había terminado ya el conjunto y entre las cosas que iba a tirar, estaba este tubo de cartón,
así que ni corta ni perezosa y como siempre indulgente, con casi todo objeto "inútil" que se cruza en mi camino, le puse un fondo de cartón, lo forré de la misma tela , lo decoré en el mismo estilo y conseguí un cubilete para poner lápices.
Los elementos decorativos difieren un poco del conjunto pero es que alguno de ellos se me había terminado y decidí variarlos todos excepto la tela de base.
Y hasta aquí, el conjunto vintage, fruto de una indulgencia tal vez exagerada.
Espero que os haya gustado.