Para hacerles el "lavado de cara" usé un trozo de tela de borreguillo de color grís que tenía guardado. Aprovechando el bies que traía la bota, a puntada escondida, y con un poco de paciencia ;), lo fuí cosiendo.
Tengo que decir, que el borreguillo, como el fieltro, la toalla y el polar, es una tela muy agradecida a la hora de coserlo a mano porque aunque no seas muy mañosa, con que aprietes un poco la puntada y uses un hilo de color similar a la tela,no se notará. Además pinté con rotulador permanente negro las costuras de fuera.
El resultado fué este:
La verdad que el resultado me encanta, me gustan mucho más así.
Además ahora son mucho más abrigaditas!! :))). Espero que os haya gustado!