Ya os conté hace unos días que estoy renovando los cojines de mi salón y hoy os enseño la segunda entrega.
Aunque es una pieza muy sencilla, para mí es muy especial y os voy a contar por qué. Mi hermano es grabador de cuadros, el es un ARTISTA con letras mayúsculas y una vez me regalo un cuadro precioso que está encima de nuestro sofá. Una parte de ese cuadro lo conforman los planos de la iglesia de San Lorenzo de El Escorial.Este verano, recorriendo algunas tiendas de telas, encontré un retal que se parecía mucho al grabado que está en mi salón. Así que lo que he intentado es hacer un cojín inspirado en ese cuadro.
El resultado es sencillo y limpio, pero muy elegante, lo que sin duda hace un juego perfecto con el grabado. Estoy deseando que lo vea mi hermano y diga: "MIRA QUE MAJO"