Esta pieza fue un encargo para la pequeña Vanessa, una amante de las mariposas igual que su mamá. Me pidieron un plumier con su nombre y decorado con mariposas en tonos morados y fucsias, así que me puse manos a la obra.
Teñí la madera del plumier de un color avellana, después puse su nombre y por último lo fui decorando con mariposas y unas plantitas verdes. Para terminar tres manos de barniz de madera y listo.
Un detalle que encantó a su dueña y que me consta luce y utiliza con orgullo. Gracias a su mamá por confiar en mí una vez más.
Os recuerdo que un plumier es un regalo muy bonito ahora que se acercan las comuniones y que lo puedo personalizar al gusto del destinatario/a. Es una propuesta con la que seguro acertaréis porque todos quedan MUY MAJOS.