¡Fácil, muy fácil! Con un poco de imaginación, una sencilla plantilla y un rotulador permanente puedes estampar lo que se te ocurra. Nosotras hemos optado por decorar nuestras tazas con una letra cada una, las iniciales de dos jóvenes cumpleañeras.
¿Hace frío y los niños se ponen nerviosos por no poder salir de casa? Dadles un rotulador indeleble y una taza, un vaso, un plato… y que personalicen sus propias piezas. Os garantizamos que pasarán un rato muy divertido y se sentirán orgullosos de regalarlos.
Alejandro (o Alexandre) Dumas, escritor de folletines aventureros inolvidables como Los tres mosqueteros o El Conde de Montecristo, bromeó con lo siguiente: “La mujer es como una buena taza de café: la primera vez que se toma, no deja dormir.”
MATERIALES:
1 taza de porcelana (también puedes usar un vaso, un plato…) Rotulador para pintar porcelana (puedes usar varios colores, depende del diseño) Una plantilla con el diseño deseado Papel calco, celo y un lápiz TUTORIAL:
1. y 2. Limpia bien la taza. Pon el papel calco y la plantilla encima sujetándola con la ayuda de la cinta adhesiva y transfiere el motivo que hayas elegido.
3., 4. y 5. Quita el calco y la plantilla y usa el rotulador para repasar y rellenar tu diseño.
6. Deja secar. Mete la taza en el horno unos 30 minutos a 180ºC para que la pintura se fije a la taza.