Restauración de un costurero de mimbre

Hola a todos,

Después de varias semanas de trabajo, por fin hoy os puedo enseñar un nuevo trabajo de recuperación, en este caso es la restauración de un costurero de mimbre.

Los costureros siempre han estado ligados a mi vida, a causa de la profesión de mi madre, siempre hemos convivido con ellos y con todo lo que guardan dentro. También estaban presentes las tardes de verano de mi infancia en Quesa, cuando mi abuela Amparo nos hacía coser, diferentes tipos de puntos en paños de algodón escuchando la radionovela o a Elena Francis.  Recuerdo que ella le llamaba «tabaquet«

Os he dicho algunas veces, que a pesar de lo poco que me gustaban aquellas tardes de costura, con los años he aprendido a apreciarlas porque me han sacado de más de un apuro .

Mi primer costurero de mimbre me lo regaló mi marido cuando eramos novios, todavía lo conservo y me he propuesto restaurarlo de aquí poco tiempo (se merece un cambio de look)

Con los años, hilos, agujas, tijeras, retales y cintas han empezado a llenar cajas que ocupan espacios que bien se podrían utilizar para otras cosas o sencillamente dejar espacio al vacío.

Hace unos meses, en ese almacén que acostumbro a visitar de muebles de segunda mano encontré este precioso costurero de tres cajones, al que le vi muchas posibilidades.



Y hoy es el día, en que por fin puedo presentaros su transformación.

Para la restauración de un costurero de mimbre necesitamos

Pintura a la tiza en color piedra

Pintura a la tiza en color blanco

Cera incolora o barniz incoloro (opcional)

Tela de algodón

Tijeras

Hilo y aguja

Pistola de silicona caliente

Martillo

PRIMER PASO: limpieza

En varias ocasiones os he comentado la importancia de la limpieza previa de los muebles y objetos que deseamos recuperar.

Si no hacemos esta limpieza previa, la pintura que queremos aplicar no se va a adherir correctamente y es posible que con el tiempo, salte

En esta ocasión como podréis observar en el vídeo, a este costurero le hacía falta una buena limpieza.

La mezcla 50/50 de agua y vinagre funciona a la perfección eliminando toda la suciedad de grasa acumulada durante años.

SEGUNDO PASO: Pintura

En esta ocasión me he decantado por una pintura chalk paint o pintura la tiza en colores piedra y blanco.



Si es la primera vez que visitas el blog, te recomiendo revises otras entradas en las que he utilizado esta práctica pintura.  Tiene la particularidad de que no necesita un lijado previo y se puede utilizar en infinidad de soportes.  Aquí puedes ver cómo recuperar unos muebles de caña y madera y también  cómo recuperar una caja con decoupage y chalk paint

El costurero tenía unas decoraciones que he pintado en color blanco



Una vez pintado el costurero lo de barnizado con un barniz incoloro al agua, para protegerlo.

Me gustan especialmente los productos al agua, son mucho más prácticos y menos tóxicos que los que necesitan disolventes para su limpieza.

TERCER PASO: Decoración interior

Lo primero que he hecho en el interior ha sido retirar toda la vieja tela, tanto en cajones como en la parte superior.



Procuraremos sacar la tela lo más entera posible, ya que utilizaremos las piezas viejas como patrones.



Para unir las nuevas piezas de tela tenéis dos opciones: coser las costuras y luego una vez montadas pegarlas en su lugar o pegarlo directamente, pieza a pieza con la pistola de silicona caliente.

El método aunque muy diferente, nos dará un resultado igual y en el caso del segundo, nos permitirá hacerlo de una manera más rápida y directa.

Antes de colocar la tela, en el fondo de cada cajón podéis poner poco de papel de embalar para dar más rigidez a la base y a la tela.  Así también evitamos que quede en contacto directo con la madera.

En el interior también haremos un acerico, que colocaremos con velcro adhesivo en la tapa del costurero, añadiéndole una cinta colgarlo de nuestra máquina de coser.



Os dejaré un vídeo a continuación para que veáis el proceso del forrado interior, este mismo método podéis utilizarlo para forrar también el interior de cajas.



Una vez colocada la tela en los cajones y en la parte superior, decoraremos el borde con pasamanería en un tono gris.

Hasta la próxima!