Nada más verlas, comencé a imaginar cómo transformarlas para que lucieran aún más. Y compré unas cuantas.
Ésta que os enseño hoy es la primera que he adornado, para convertirla en una libreta para la cocina. Los dobujos de las hojas ayudan mucho, ya que son muy bonitos.
Así que recorté un trozo de cartón pluma, lo entinté con Disstres Vintage Photo, y lo forré con este precioso papel de cerezas de la colección "Early Bird" de Cosmo Cricket.
La imagen de las cocineras la tenía guardada desde hace mucho tiempo, a la espera de un lugar en el que luciera, y cuál mejor que éste.
Después, una cinta zig zag de cuadritos Vichy verdes y blancos, y cuatro botones en las esquinas para rematarlo. Y un lápiz unido a un trozo de hilo bala para que no se pierda. Todo ello para enmarcar la libreta. Me gustó el resultado, y decidí regalárselo a mi hermana mayor, para que la coloque en la cocina de su casa de vacaciones en la que tanto disfrutamos todos. Así que la veré a menudo.
En la parte trasera he colocado unas láminas finitas de imán, que se pueden encontrar también en bazares. Pero yo os cuento un secreto: tenía guardados unos imanes de Pokemon que se pusieron de moda hace años, y a los que mis hijos se aficionaron. Y como aquí no se tira nada, pues ahora me han venido de perlas.
Espero que os guste, y que disfrutéis del fin de semana que ya se acerca.
Un abrazo cariñoso para todas.