Me pidieron que su estructura fuera sencilla. Así que la base es rectangular, de cartón de 2 milímetros. El papel de fondo es de October Afternoon, y con él forré también el bolígrafo.
En los bordes puse una ondulina de cuadritos vichy rojos, que me encanta y que hace juego con la libreta, y en los remates, botones verdes con un dibujo de flor.
La libreta está sujeta por detrás con una goma, para que sea fácil reemplazarla cuando ésta se acabe. Y en la parte superior, unos stickers en 3D con motivos de cocina que tenía hace tiempo y todavía no había encontrado el trabajo adecuado en el que ponerlos.
La entregué en una preciosa bolsa roja decorada con el mismo papel de fondo que el soporte de la libreta, pero a ésta no le hice foto, me despisté. Eso sí, cualquier trabajo gana muchísimo con una buena presentación, y creo que el conjunto quedó bastante bien.
Espero que os guste. Ya véis que es sencillísima, así que sólo hay que animarse. De esta forma nunca nos faltará nada en casa.
Un abrazo para quienes me leéis, y sabéis que os agradezco los comentarios enormemente. Hasta la próxima.