De esta manera según voy endureciendo unas piezas, voy haciendo otras y así hasta que no he endurecido unas, no empiezo a endurecer las siguientes, que serían la puerta de entrada para las demás. Cuando termine de endurecer las botas, comenzaré a darle capas a las espinillas y comenzaré a hacer los muslos.
Una vez endurecidas las botas, las sustituiré por las antiguas. Así mantendré un control sobre lo que voy haciendo y podré deshacerme de la armadura poco a poco.
No es que me guste haber empezado de nuevo toda la armadura, pero era lo que tenía que hacer para poder tener un proyecto digno. Ésta vez me fijaré mucho más en los detalles. Las rodillas, por ejemplo. El sistema de unión chocaba de plano entre los muslos y las espinillas pues había unas piezas que se superponían. Las voy a remodelar sujetando ambas piezas como hice con la antigua armadura Mark-VI, de forma que quede fidedigno. Al mismo tiempo, haré unas nuevas corvas en esa zona para tener la armadura terminada por esa parte. No es que las corvas del Mark-VI estuvieran mal hechas, pero es que son demasiado cortas para tapar todo lo que hay que cubrir.
La fase de pintado la dejaré para el final. Sé que dije ayer que iba a terminar completamente cada pieza, pero es algo que quiero hacer de una sola vez.
Mañana podría tener endurecidas ambas botas y preparadas ambas espinillas. Un buen trabajo hoy.