Pero el otro... el otro ha quedado casi perfecto a como lo imaginé. Las prisas por el uso de cera de abejas a pesar del calor que hacía ese día, me hicieron temblar y sudar...jejeje... (la cera hace que la masa del jabón se solidifique enseguida y cuesta trabajar con ella a la par que el resultado es un jabón imperfecto con agujeros y tal porque ya no deja salir el aire atrapado) pero al final quedaron bien chulas.
Me refiero a mis mini-playitas de jabón!
Llevan arena de verdad, de la costa del Delta del Ebro, pero no mucha porque pensé en si saturaríamos los desagües! El caso es que la próxima vez le echaré más arena ya que si no te acercas apenas se distingue.
En esa parte naranja, con aceite de zanahoria, hay arena para exfoliarnos de una manera suave tanto cara como cuerpo.
Y en la parte azul, sólo un poco de colorante en mica. De hecho quedó turquesa más que azul-azul... jeje... pero no me digáis que no quedó igual de apetecible...
Son jabones de sal, con sales del Mar Muerto, ideales para activar la circulación que siempre va bien a nuestras piernas femeninas, verdad? ;)
También lleva algo de manteca de karité y aloe vera.
Espero que os gusten tanto como a mi :D
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