Y aprovechando que tenía unos fresones grandes y maduros, me puse manos a la obra a experimentar con ambos, no sabía que grado de color rojo quedaría en jabón y quería asegurar un tono rojizo al menos con uno de los dos elementos.
Y bien, el rojo-rojo no lo obtuve ni con uno ni con los otros pero igualmente me parecen tan apetecibles... Además, ambos frutos son antioxidantes. ;D
En esta publicación, más breve, sólo os dejo los jabones de tomate que como podéis ver dejó un tono anaranjado que no está mal, pero ni comparación del rojo de un tomate, verdad? Aún así, el experimento ha servido para aportar a nuestro saber para cuando queramos un tono naranja suave y usar tomate como colorante para tal cualidad.
De los fresones y el jabón resultante, en otro post más adelante, nos vemos!
El poquito rojo que se ve por encima es del jabón con fresas
Ingredientes:
aceite oliva virgen
aceite coco
cera abejas
tomate triturado
y nada más!