Aunque esta técnica me daba un poco de miedo, miedo porque algunos blogs lo pintaban como una cosa super difícil, con materiales y procedimientos un tanto extraños.
¿Pero que podía perder, una fotocopia y un trozo de madera? (ojos entornados), era un gasto que podía asumir.
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Te cuento mis experimentos igual que Carmina Ordóñez contaba "SU verdad".
Básicamente se necesita una fotocopia, en impresora láser con tóner de tinta, no de inyección de dos cartuchos, vamos, las de toda la vida, aunque yo me salté la primera regla y lo hice con la que tenía en casa, usease, la de dos cartuchos.
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Después, se puede usar líquido especial para transferencias o, Mod Poge, desengrasante al limón de Hacendado (sí, sí, eso he oído por ahí, y de limón, que a lo mejor el otro no funciona, por Dior!), cola blanca reducida con agua...
Y yo, para hacer la contraria a la humanidad, probé con un adhesivo para doradores que tenía por casa y no había usado nunca y con cola blanca. Las dos fórmulas me funcionaron, pero con la cola blanca quedaba blanquecina la transferencia dejando ver un poco el papel y no me gustó el resultado, así que ya os he contado mi secreto.
Hubiera podido quitarle la etiqueta y venderlo como pócima mágica, pero no podría haceros esto a vosotr@s, mi público, mis "fanses".
Aquí os dejo el vídeo para que veáis el procedimiento fácil y sencillo, y que hagáis vuestras propias pruebas, experimentos y variaciones que se os ocurra:
¿Qué os ha parecido? wachis, no? pues a intentarlo en casaaa!!!
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