Estos pasados días festivos, he estado realizando una actividad muy entretenida para hacer sobre todo con niños.
¿Conocéis el plástico mágico?
Mis sobrinos y yo nos hemos enganchado a todas sus variantes.
El plástico mágico, es un tipo de material que con el calor (secador de pelo u horno) encoje aproximadamente a un cuarto de su tamaño.
Con él podemos hacer llaveros, pendientes, colgantes... las aplicaciones son infinitas!
1.Samuel y yo utilizamos el plástico transparente en primer lugar.
Ideal para que los niños desarrollen su creatividad. Se debe de pintar con rotuladores permanentes. El efecto de éste es similar a las vidrieras y visible por ambos lados. Este plástico puede hacerse mate si lo lijamos. Una vez lijado podemos pintarlo también con lápices.
Tras diseñar y pintar los llaveros que hicimos, recortamos los dibujos silueteando alrededor a unos 3mm del borde. También con un abre-agujeros hicimos una apertura en cada uno de los dibujos.
A continuación, los metimos en el horno a unos 150° con calor arriba y abajo.
Cuando quedan planos es el momento de retirar con cuidado. Esperar a que enfríen y ponerle la cadena y el aro para las llaves... o el adaptador de pendiente...
2. Con Ainhoa utilizamos el plástico mágico con imágenes prediseñadas. En este plástico podemos utilizar también lápices.
Es increíble como se intensifica el color de los mismos.
3. Literalmente "enganchada" decidí buscar el plástico imprimible. En mi ordenador busqué unas fotos bonitas, y las saqué en este papel.
RECOMENDACIONES:
Las ceras no pueden utilizarse para colorear nuestras realizaciones.
Colocar el plástico encima de papel de horno nos ayudará a la hora de sacarlos.
La bandeja donde los coloquemos debe estar fría.
Hay que dejar suficiente espacio entre ellos, para evitar que al disminuir de tamaño puedan pegarse entre ellos.
Es importante no hacer figuras demasiado grandes, pues se pueden pegar sus bordes.
Es imprescindible retirar los plásticos en el momento justo, cuando se aplanen dentro del horno.
El tiempo varía dependiendo del tamaño original de cada pieza, así que os insto a que os quedéis esperando cerca. ¡A los niños les encanta ver el proceso! Recordarles que no deben acercarse demasiado al horno y que éste, solo debe ser usado por un adulto.
Poner algo de peso encima de las figuras al instante de sacarlas, nos ayudará a que queden completamente lisas y consigamos un acabado más profesional.
Creo que ya está todo lo que os tenía que contar! Tan sólo queda animaros a realizar alguno de estos proyectos.
Os añado las fotos del proceso de los plásticos que hicimos.
Fuente: este post proviene de Pinky's DIY, donde puedes consultar el contenido original.
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