¿Te imaginabas que algo tan cotidiano como una huevera, podrías transformarla en encantadoras flores?
Unas flores muy bonitas, con un sinfín de posibilidades para utilizarlas cómo más lo desees.
Hoy decoraremos un marco de fotos, como también podría ser un espejo.
El resultado es muy romántico, con una estética preciosa que consigue olvidar el origen del material.
Y qué mejor manera de enmarcar con flores momentos inolvidables, ¿verdad?.
Vamos, busca un par de hueveras, y nos pondremos manos a la obra!
Utilicé el marco de fotos Nyttja de Ikea que siempre tengo en casa para cuando quiero realizar proyectos de este tipo, pero puedes hacer un marco con cartón, que es muy fácil.
Fe de erratas: Leáse ¨ves¨.
Deja volar tu imaginación, escoge el color para pintar las flores, decide si las quieres todas iguales, diferentes o en dos tonos. ¿Cuántas aplicarías? ¿Bordeando todo el marco, sólo un par en la esquina...?
¿Y ya sabes qué foto vas a colocar?
En el próximo post DIY, te enseñaré cómo hacer guirnaldas con esta misma técnica pero con un diseño de flor diferente.