Aunque en la modernidad se representan generalmente muy bellas lo cierto es que en la tradición clásica la belleza de las sirenas radicaba únicamente en su voz.
Sabíais que las primeras historias de sirenas aparecieron en Asia.
Tradicionalmente la sirena se representaban con cuerpo de ave y rostro de mujer.
En la antigüedad muchos marineros aseguraban haber visto sirenas en los mares lejanos y se cree que los navegantes confundían a estas con una especie de ballena blanca.
En la mitología griega se cree que las sirenas eran seres de un gran atractivo que seducían a los marineros con sus bonitas voces haciendo que estos saltan al agua para escucharlas y de esta manera morían ahogados pero existía la creencia que si alguien conseguía soportar su canto ellas deberían morir según cuenta la leyenda Ulises se ató al mástil de su barco y pidió a sus marineros que se taparan los oídos con cera así es como logro escuchar el canto de las sirenas sin caer en la tentación.