Llega la Navidad y con ella la nostalgia para aquellos que han tenido que irse fuera de su tierra. Con la bajada de precios y la proliferación de las empresas de mensajería, regalar productos típicos a aquellos que no pueden conseguirlo es cada vez una costumbre más habitual.
Un Roscón de Reyes en Berlín, un jamón de Jabugo en Miami o una caja de polvoronesde Estepa en Estocolmo puede ser el regalo perfecto para reconciliar paladar y memoria. Pero, ¿cómo hacer que la recogida sea también un momento especial? Te presentamos algunas ideas para que tu envío sea recordado con cariño.
Personaliza el embalaje exterior
La primera y la más adecuada para todos los bolsillos es también la más sencilla, basta con personalizar el embalaje exterior a mano con los motivos que queramos. También podemos encontrar cajas a muy buen precio del color favorito del receptor y pegar elementos decorativos o mensajes de sus seres queridos, de forma que la misma caja se convierta en parte de la sorpresa.
Para parejas, echar un poco de su perfume favorito también puede ser una opción, aunque teniendo en cuenta que si mandamos un buen queso curado, un chorizo o un jamón, el olor de estos últimos va a prevalecer, salvo que hayamos elegido un embalaje inodoro.
Elige el envoltorio adecuadoElegir un envoltorio adecuado al alimento que vamos a enviar es fundamental. Actualmente, en cualquier web de embalajes para comida se pueden encontrar a muy buen precio diferentes opciones personalizables para que el producto llegue en las mejores condiciones posibles para su degustación.
Por ejemplo, para mandar galletas caseras es conveniente utilizar un liner, una especie de cartón ondulado de una cara que funciona como un cojín, impidiendo a éstas quebrarse en el viaje. Sobre este primer embalaje podemos colocar nuestro envoltorio personalizado o elegir un liner ya ilustrado o de color.
Barritas de caramelo que sirven como cordón, estrellas de papel o cintas de lanas multicolor son otras de las opciones que tenemos a nuestra disposición y que, posiblemente, no se nos han ocurrido.
Crear un sello esculpiendo en una goma nuestro motivo preferido ?ahora están de moda los bigotes- puede transformar el tradicional y aburrido papel marrón en lo más indel momento. Sustituir el bigote por un caramelo para dulces y un jamón para embutidos puede ser otra forma de llevar de forma simpática nuestro contenido.
Protege el contenido con fundas personalizadas
Para los partidarios de lo vintage el papel de periódico es la mejor opción. En la actualidad se pueden descargar réplicas de periódicos de determinados días así que buscando un día especial del receptor para forrar el envío se puede convertir lo que podría parecer cutre en un detalle muy especial.
Por último, las botellas, además del indispensable plástico de burbujas si es de cristal, se pueden forrar con una funda personalizada reutilizable. No hay nada más flamenco que enviar una botella de fino con una funda de lunares o más rockero que una de whisky con funda de cuero negro o vinilo, por ejemplo. Y todas se pueden comprar. Si prefieres una opción más barata, realizar una funda con papel transparente de celofán puede parecer de lo más elegante.
Y envía tu regalo de una forma barata
Elijas la opción que elijas, recuerda que cuánto más personalizado más probabilidades de éxito tendrá para que recuerde el envoltorio tanto como la comida. En este enlace puedes consultar las empresas de transporte que encontrarás en Packlink, la forma más barata de enviar o regalar comida.
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Colaboración-post invitado:
Artículo escrito por Isabel Martínez
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