Lo que más me gustó de esta actividad es que la barba de Papá Noel son las manitas de los peques.
Me pareció una idea genial porque es un recuerdo de nuestras hijas e hijos donde se refleja la edad.
Cuando mi hija venía con este tipo de manualidades, siempre le ponía la fecha por detrás y aún sigo conservando todo lo que hizo y cada año me sirve para decorar la casa o el árbol de Navidad.
La idea la encontré en Simple Very Day Mom con el único cambio que en el gorro se puso algodón blanco o de colores según las preferencias de los peques.
Las plantillas las transfiere a una cartulina pero prefiero que sean ellos y ellas las que pinten a su gusto.
Los ojos lo pintaron con rotulador negro e hicieron un agujero por donde pasaron un hilo para que lo puedan colgar en cualquier sitio de casa.
En cada taller estoy dos horas con los niños y las niñas, por lo que llevo más manualidades que te iré contando. ¡Solo tienes que ir visitándome para que descrubras lo que vamos haciendo!
¡Hasta pronto!