Hace unos días os mostramos en twitter nuestro huevo de dragón.
Son muy fáciles de hacer, y quedan preciosos en cualquier sitio, se pueden hacer del tamaño que queráis.
Solo necesitáis muchas muchas chinchetas (de las de metal de toda la vida) y huevos de poliespan, de los que venden en tiendas de manualidades, escoger el tamaño que más os guste, pero contar que una vez terminado agranda un poco.
La primera chincheta se pone en el centro de la parte superior del huevo, la parte pequeña, y se siguen poniendo al rededor, montando una encima de la otra como en la foto.
Así hasta acabar el huevo, ¿fácil verdad?
Esperamos ver como quedan los vuestros, y si os animáis lo podéis pintar las chinchetas de colores, ya quedan geniales.
Hasta la próxima...
Fuente: este post proviene de Campos De Trebol, donde puedes consultar el contenido original.
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