Esta frasca fue una garrafa de vino olvidada y finalmente arrojada a un contenedor de donde la rescaté, limpie y con unas pinturas de vidrio la convertí en un campo de girasoles. Creo que me ha quedado preciosa. Fallos tiene muchos, que nunca había hecho nada parecido, pero para mí está perfecta.
Aquí otra vista.
Y aquí desde otro angulo.
Este es otro jarron que cogí del contenedor. Era completamente liso, sin ningún tipo de dibujo o grabado. Así que otra vez eché mano de las pinturas de vidrio, cloisené y .........? Haber quien adivina que es lo otro y me ha quedado un jarrón muy elegante.
Aqui posando desde otro angulo.
Y aquí está el último frasco. Será difícil averiguar que se esconde debajo de un trocito de tela de camisa, un poquito de masa y otro poquito de oro rico, pues debajo de todo ello hay un frasco de espárragos. Quien lo diría.Ya tengo preparados otros frascos y vasos para tunearlos. Ya os contaré en qué los he convertido.