ENVOLVER REGALOS PARA ALGUIEN ESPECIAL
El Furoshiki es una técnica de embalaje milenaria (más de 1.300 años de antigüedad ) originaria de Japón. Su rasgo distintivo frente a otros modos de envolver regalos es que en este se utiliza una tela cuadrada en lugar del papel, y en vez de pegamento o cinta adhesiva, en el furoshiki nos valemos de nudos y pliegues (sin costuras ni cortes), lo que da lugar a resultados cargados de poesía visual.
Los materiales más comúnmente empleados son la seda, el nylon, el algodón, el rayón y últimamente también el wax. Obviamente, es una técnica ideal para envolver regalos para alguien especial ¿no creéis?
VENTAJAS DEL FUROSHIKI
Este método tiene numerosas ventajas frente a los envoltorios tradicionales.
En primer lugar, es más original y elegante. Un pañuelo de tela, incluso los más económicos de algodón, otorgan distinción y refinamiento a cualquier presente.
En segundo lugar, resulta muy práctico a la hora de envolver regalos con formas “complicadas”. En algún momento todos hemos tenido que envolver un regalo con una superficie irregular, desde botellas hasta balones pasando por muñecos, y hemos sudado horrores para que el papel del envoltorio nos quedase medianamente digno y no como si lo hubiéramos sacado de la papelera tras tanto pliegue…
Pues el Furoshiki soluciona este problema maravillosamente, ya que la tela se adapta a las superficies sin perder un ápice de delicadeza.
La tercera ventaja es que es incomparablemente más ecológico que el papel. Un envoltorio tradicional de papel tiene un sólo uso, a menudo lo rompemos a la hora de desembalar el regalo, y cuando no es así, pocas veces lo conservamos para utilizarlo una segunda vez, por lo que va derecho a la basura. En cambio, en el Furoshiki no se tira nada; nos desmarcamos de la cultura del “usar y tirar”.
TUTORIALES DE FUROSHIKI
En la actualidad existen más de 500 estilos de nudos susceptibles de ser aplicados al arte del Furoshiki, por lo que las posibilidades creativas son enormes. Vamos a ver algunas de las modalidades más populares.
Yotsu Musubi
También conocido como “cuatro nudos”. Es fácil, rápido e ideal para regalos pesados. Se coloca el regalo en el medio y se atan dos esquinas opuestas, por encima del objeto. El siguiente paso consiste en reunir las otras dos esquinas restantes (lógicamente también opuestas) en el mismo nudo anterior con la tela cubriendo el objeto.
Bin Tsutsumi
Esta modalidad es perfecta para envolver dos botellas. Lo primero es extender el pañuelo en modo rombo y colocar sobre él las dos botellas en posición horizontal, con las bases enfrentadas y los cuellos apuntando hacia las esquinas. Es recomendable que la distancia desde el corcho hasta la esquina de la tela sea de al menos veinte centímetros.
A continuación dobla la esquina superior hacia la inferior, sobre las botellas, y acto seguido, enrolla las botellas en el Furoshiki, hacia abajo. Después acerca los dos extremos resultantes, doblando el rollo justo por el espacio entre las dos botellas y anuda los extremos. Mi consejo personal es que hagas un doble nudo para evitarnos sustos con el cristal de los envases.
Kousa Tsutsumi
En este tipo de Furoshiki, los lazos quedan todos por un mismo lado, dejando los restantes completamente lisos. Es la técnica más usada a la hora de envolver libros. El primer paso consiste en colocar nuevamente el pañuelo en posición de rombo y llevar las esquinas superior e inferior de la tela al centro. A continuación se estira la esquina inferior hacia arriba y la de arriba, hacia la parte inferior, de manera que el libro quede bien agarrado por ambas.
En el tercer paso debes estirar las esquinas horizontalmente y después cruzarlas, de manera que la que se quedó al lado derecho quede ahora en el izquierdo y viceversa. Ahora nos centraremos en el nudo izquierdo: se trata de anudar la esquina que ahora está en la izquierda con el nudo que desde el comienzo ha permanecido en la parte izquierda. Realiza un doble nudo bastante holgado, sin apretar en exceso. Por último, repite esta operación con las esquinas que tienes a tu derecha.
En la siguiente infografía, elaborada por el gobierno de Japón, aparecen esquematizadas varias técnicas. Si necesitas aún más ideas, en este recopilatorio de Youtube encontrarás 45 tutoriales.
OTROS USOS
No obstante, el Furoshiki no solo se emplea para envolver regalos para alguien especial. Con este arte se pueden elaborar bolsos, mochilas, y redecorar muebles. Siguiendo con este enfoque (el de utilizar el Furoshiki no sólo como un envoltorio), hace una década el Ministerio de Medio Ambiente japonés lanzó una campaña para recuperar y promover su uso como bolsa de la compra frente a las bolsas de plástico, tan nocivas para la naturaleza. El Furoshiki que difundieron las autoridades estaba elaborado con una fibra procedente de botellas recicladas, para recalcar su valor ecológico. Desde entonces, el número de Furoshikis empleados como bolsos no ha dejado de incrementar, dentro y fuera de las fronteras japonesas.
LA EMOTIVIDAD DEL FUROSHIKI
Mi experiencia personal con el Furoshiki ha sido muy positiva. He utilizado esta técnica en tres ocasiones, la última cuando regalé a una amiga una pulsera de la amistad. Era un detalle muy íntimo (una pulsera de plata con nuestros nombres), y quería que todo el conjunto del regalo fuera personalizado. Por ello escogí un pañuelo con sus colores favoritos y opté por la modalidad Kakushi Tsutsumi. Cuando le entregué el regalo se emocionó profundamente al percatarse del nivel de detalle y esfuerzo que había detrás de él. Además, a día de hoy, emplea con frecuencia el pañuelo como foulard. Pocas cosas hay tan gratificantes como ofrecer un regalo a alguien que nos importa, y ver que lo aprecia y le gusta. Definitivamente, creo que merece la pena hacer el esfuerzo en envolver elegantemente un regalo si la ocasión lo requiere.