¡Hola! Ya estoy de vuelta después de dos semanas de viaje. Si me sigues por Instagram, Twitter y Facebook (y si no, puedes hacerlo en estos enlaces), habrás visto que he estado de vacaciones en Amsterdam. Ayer volvimos, ya con ganas de estar en casa, la verdad, porque hemos tenido mucho trote. Sobre todo porque era nuestro primer viaje al extranjero con Néstor y todos hemos tenido que adaptarnos a la novedad.
Esperábamos encontrar buen tiempo primaveral allí, siendo ya mediados de mayo, pero no hizo demasiado sol la mayoría de los días, aunque la lluvia nos respetó bastante. De todas formas, pudimos disfrutar de la ciudad, de sus colores y de sus flores.
Y hablando de flores, hoy te traigo un collar que hice justo antes de irme de viaje, para lucir en una comunión. Puede que hayas visto el tutorial de este collar en negro y violeta, te dejo el vídeo para que lo recuerdes o lo veas si no lo has hecho ya:
Esta vez lo quise hacer más primaveral y para ello hice un degradado en dos tonos de rosa que me hace recordar a las flores de cerezo. Sin embargo, no estoy del todo contenta con el resultado, ya que es la primera vez que utilizaba arcilla de la marca Kato para estas flores (los anteriores collares los hice con Prémo), y no me quedaron como me habría gustado.
Aunque Kato tiene fama de ser una de las arcillas de mayor dureza, desde que cambiaron la fórmula ya no es tan firme, y lo he notado especialmente en estas flores. Trabajar la arcilla no me ha supuesto ningún problema, pero durante la cocción, a pesar de haberlas colocado sobre una base de guata o algodón de relleno, perdieron su forma original y quedaron bastante irregulares. En este caso no es muy relevante porque no es necesario que las flores sean perfectas, pero la verdad es que en comparación con los collares anteriores, el acabado de éste me gusta bastante menos. Aquí puedes ver una foto del collar blanco y otra del rosa para que compares los acabados.
No quiero desaconsejar en absoluto la marca Kato, ya que tiene un gran prestigio y es una arcilla de gran calidad. Pero hay que elegir el material que se adapte mejor a cada trabajo, y de la misma manera que por ejemplo FIMO Soft o Sculpey III están más indicados para trabajos infantiles, Kato es la reina de las arcillas cuando se trata de murrinas o millefiori. Desde mi experiencia personal, Prémo es de las arcillas más versátiles, ya que se comporta muy bien en las murrinas, tiene una dureza media y para este tipo de trabajos como las flores del collar, se comporta a la perfección, conservando sin problemas la forma inicial.
Como digo, cuestión de gustos.
Te dejo a continuación con una fotos más del resultado del collar. Espero que te guste y que te animes a hacerlo en otras combinaciones de colores.
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