Hoy os enseño un espejo Malma, de la marca Ikea, alterado. La idea surgió como reto eN el foro de scrap
de Facilísimo. Este espejo se vende en madera sin tintar, y es perfecto para decorarlo pintado, con decoupage, en scrap o cualquier otra técnica que se nos ocurra. Hay que reconocer que estos suecos tienen buenas ideas para el diseño.
Y me puse a ello. Pero esta vez no me resultó fácil. Al principio tenía bastante claro lo que iba a hacer. El papel, de K&Company, estaba elegido con tiempo. Son unas flores muy delicadas, y con un fondo que imita a madera que me gusta mucho, además de su aire de papel de empapelar antiguo.
Y puesto el papel de fondo, cambié de idea sobre la decoración, y pegué a estas dos señoras tan elegantes de los años 50. Y ese fue mi error, pegar antes de tener claro exactamente lo que quería hacer. Una vez hecho, no hay vuelta atrás.
Me quedé estancada, y lo dejé durante unos días, hasta que me puse delante de él y comencé a colocar perlas imitando arabescos que suben por los tallos de las hojas. Y realicé un centro de unas flores maravillosas compradas a Inglaterra, que ya tenía ganas de estrenar. Un poco de cinta zig zag o piquillo, como queráis llamarle, unos botones, y listo.
Un truco del foro: para hacer la foto, poner en la parte del espejo un trozo de cartulina plateada (yo he usado las tapas de los táperes de aluminio de usar y tirar), para que no salga reflejado ni tu mano, ni la pared o el techo.
Espero que os guste como ejemplo, que éste ya tiene destinataria.
Un abrazo enorme, y sabéis que me encanta leer vuestros comentarios. Hasta la próxima.
Fuente: este post proviene de LAS COSAS DE MARTAO, donde puedes consultar el contenido original.
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