Que me pierden los mercadillos es un hecho, ver uno y es imposible pasar de largo, aunque puedo irme sin comprar nada, pero un vistazo es obligatorio.
A veces encuentras tesoros como estos pañitos que vistos en un montón parecen cuatro trapos sucios y amarillentos pero ¡SORPRESA! Además de los pañitos un mantel de encaje de Bruselas, sin un roto, solo sucio y con manchas amarillas, nada que un buen lavado con oxigeno activo no pueda arreglar y todo por 4 euros.
Mantel lavado y planchado, aún estoy pensando si plancharlo con un poco de apresto o no.
Uno de los pañitos, una tela rústica y nuevo bolso muy cómodo.
Ahora se admiten sugerencias para los otros dos pañitos, aunque pinterest es un pozo de ideas.