Este bolso que hoy os enseño está repleto de errores, pero no por tan elevados motivos sino porque el bolso es para mí. Nuevamente me ha pasado: si yo soy la destinataria de mi propio trabajo no pongo tanta atención a la vez que no me exijo tanto y en consecuencia cometo errores.
Pero también os digo que están muy bien disimulados. Tanto que ahora no los encuentro, pero como son errores importantes supongo que algún día darán la cara.
Es también otra manera de evaluar la importancia de esas costuras mal hechas con la máquina y enmendadas con la mano.
El bolso está hecho con un paquetito de precortados del que me enamoré por sus colores tan afines a mi forma de vestir. Por ambos lados es prácticamente igual como podéis comprobar.
Le añadí una tela más en azul para el lateral y el asa, junto con otras dos en beige para bolsillos interiores y forro. Cremallera para el cierre y regulador en el asa, todo lo que a mí me resulta más cómodo. Interior con bolsillos y poco más.
Un bolso sencillo que comencé en otoño y al fin en Reyes lo estrené.
Muchas gracias a tod@s por vuestra compañía.