Cuando empieza a mejorar el tiempo una blusa de colores ligera es lo primero en lo que pensamos a la hora de vestirnos.En estas blusas ligeras muy importante son los acabados, de nuevo el dobladillo finito que te enseñaba a coser en el post del pañuelo ayuda y mucho a que quede bien y de forma rápida.
En eso fue lo primero que me planteé cuando me puse manos a la obra con este modelo. Elegido por tener mangas, pero ligeras con unas aberturas a partir de los hombros, esa zona era la que si lleva algo más de trabajo, por eso decidí aligerar lo más posible el resto de la blusa.
Así que decidí sacar de nuevo de mi colección de prensatelas, el de dobladillo enrollado o rulotte, si no lo conoces te enseño en este vídeo como funciona en diferentes tejidos:
Pero si te preguntas qué modelo es, se trata de un modelo del año pasado el 110 de Burda Style de junio del 2018.
Como ves se trata de un vestido, que he convertido de forma simplificada en blusa, dándole la largura necesaria, obviando el corte en la cintura, la costura del delantero y dejando sólo una cinta para atar, que va desde el comienzo del hombro al centro de la manga superior, que es donde hago un único nudo o lazada y no dos en cada lado que es cómo aparece en el modelo.
Así me ha quedado la blusa, lo importante para mi, ha sido realzar la tela y al final estoy contenta con el resultado y por eso lo voy a pasear por Mimi.
Y tú, ¿cómo te llevas los modelos a tu terreno? ¿Te gusta hacer modificaciones?
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así no te pierdes nada:
Fuente: este post proviene de Moda en la Costura DIY, donde puedes consultar el contenido original.
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