Hola a todos y bienvenidos un día más. ¿Qué tal va la semana?¿Os ha volado como a mí.
Hoy es miércoles y como siempre vengo con un truco, esta vez os propongo transformar una camisa vieja, o que no utilicéis, en una camisa de moda con hombros al aire y cuello fruncido. Y sin más rollo empezamos.
Transformar el camisa vieja en una con hombros al aire.
Este verano hemos visto muchísimas camisas con los hombros al aire, son unas camisas fruncidas que me encantan.
En mi caso tengo bastantes blusas que tienen un formato parecido unas con otras, de cuello alto, entalladas y de puños, y me estaba empezando a aburrir así que decidí coger una que tenía blanca y darle un nuevo aire.
Paso a paso para transformar camisa vieja.
Materiales;
-Una blusa vieja.
-Una camiseta cuyo escote nos guste para tomar de referencia.
-Una goma ancha.
-Aguja e hilo o máquina de coser.
-Tijeras.
-Una goma ancha.
-Lazo o el elemento decorativo que queramos.
Veis la camisa y la goma que vamos a usar, que por cierto aún no había planchado, sorry.
-Lo primero es elegir la blusa y una vez hecho esto decidir hasta donde queremos que nos llegue el escote y lo marcamos con una referencia. Yo puse un boli encima para saber aproximadamente hasta donde quería que me llegara.
-Una vez decidida la altura debemos tener en cuenta que hay que dejar margen para hacer un canal por donde pasaremos una goma y dejar también un pequeño margen para un dobladillo. Yo puse una camiseta que tiene un escote que me gusta y me guié por ella. Y una vez elegido el escote lo marqué a ojo con otro boli encima.
La camiseta de tirantes es mi referencia, el boli azul indica hasta donde quiero que me llegue el escote, más o menos el mismo de la camiseta, el el negro indica por donde debo cortar para que me quede margen para el canal y el dobladillo.
-Una vez que sabemos por donde hay que cortar para dejar margen suficiente para el dobladillo y el canal lo marcamos un poco con un lápiz o un jabón de modista.
-Y doblamos la camisa de lado, una manga exactamente encima de la otra y dibujamos el escote elegido ya en firme. Y con mano segura lo cortamos.
Si os fijáis he marcado el escote con lápiz y con la camisa así doblada y las mangas perfectamente alineadas podemos cortar sin miedo.
-Con el escote cortado hacemos un dobladillo para que quede mejor y lo cosemos(a ser posible a máquina, yo lo hice a mano porque no tengo, mi madre sí así que la próxima vez se la pido) muy bien.
Y a continuación hacemos un canal alrededor del cuello dejando la parte delantera sin cerrar para meter una goma. Es importante que esta canal quede muy bien hecho para que no se nos desarme todo mientras estamos por ahí. Si tenéis máquina es mejor, pero a mano se puede, yo lo hice así.
Aquí ya había metido la goma, solo quedaba repartir el fruncido, atar y cortar hilos y partes feas.
-Ahora toca meter la goma. Yo estaba segura de que tenía una blanca pero no he sido capaz de encontrarla así que utilicé una negra, por suerte con el dobladillo la tela queda más gruesa y no se nota que es negra.
La enganchamos en un imperdible y la vamos pasando. Es muy fácil.
- Cuando tenemos la goma metida vamos moviendo para repartir el fruncido, y una vez que está a nuestro gusto la atamos y cosemos las esquinas para que no se salga.
Luego solo había que coser la entrada y salida de la goma, que yo tapé con el lacito.
- A mí no me gustaba como quedaba así que cogí un lazo de un verde que me encanta, hice una lazada y se la cosí para tapar esas partes que quedaban algo solapadas.
-Y para darle una gracia con un poco de lazo sobrante bordeé los puños, así le he dado un toque de color y alegría a una camisa sobria que ya no me ponía nunca.
En la foto no se ve lo chula que quedó porque la hice los días en los que estuve mala y llevaba debajo una camiseta muy gruesa que le quita brillo, pero bueno, más o menos os hacéis una idea.
Lo sé, la camiseta debajo es un crimen, es que estaba malita pero sin ella queda ideal, enseñamos más hombro y no me que tan tan embutida, es que la camiseta era muy gruesa. Como veis los puños van a juego con el lacito que tapa la zona por donde metí la goma.
Yo la he usado bastante para ir a la playa, por ejemplo, con unos shorts, en veranito cuando estamos morenos queda genial.
Bueno, pues hasta aquí la idea, es muy sencilla pero a mí el resultado me gusta mucho. Si os apetece ver una costumización de un abrigo y convertir un abrigo normal en uno de pasarela podéis hacerlo aquí.
Mil gracias por leerme y nos vemos mañana con alguna reflexión.
Y vosotros; ¿transformáis vuestras prendas?¿Tenéis una camisa de esas de hombros al aire?¿Os gusta como me ha quedado?
¡¡¡¡¡Hasta mañana!!!!!