Solo necesitas unas tuercas, alambre, algo de cuerda y un alicate para doblar el alambre. Según el tamaño de las tuercas y el alambre será el resultado de la pulsera. En este caso yo la he hecho plateada, pero también hay tuercas doradas o cobrizas y pueden crear un efecto muy diferente.
Lo primero que hay que hacer es decidir el diseño de la pulsera y el número de tuercas que quieres emplear. Después vas uniéndolas según la forma que le quieras dar.
Solo hay que cortar pequeños trozos de alambre e ir uniendo las tuercas según el diseño.
Una vez que tienes todas las tuercas unidas se pone la cuerda a cada extremo.
Este es el resultado final, puede ser muy diferente según el número de tuercas que le pongas o la forma en que las unas.
Para cerrarla se usa otra tuerca y se meten ambos extremos de la cuerda a través de ella.
Espero que os haya gustado y le saquéis partido a la idea!
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Un besito, Dori.