No os mentiré: me siento triste e impotente, me emocionan las muestras de cariño hacia todos los que están arrimando el hombro y a veces me desespero pensando en el tiempo que tenemos que estar encerrados. Pero... estamos aquí para intentar distraernos y poner un poco de positividad al momento que estamos sufriendo. Así que hoy os voy a enseñar cómo reciclar un bote de leche de plástico.
Normalmente usamos muchos botes y recipientes de plástico en nuestra vida diaria y aunque lo ideal sería reducirlos progresivamente hasta hacerlos desaparecer, de momento los vamos a ir reciclando y haremos unos bonitos pendientes. Muy fácil y rapidísimo de hacer. ¿Queréis verlo?
un bote de leche
tijeras
lima
laca de uñas
una chincheta
cadena
dos anillas para pendientes
ganchos de pendientes
un palito de brocheta
un cuenco
agua templada
film de plástico
Lo primero que haremos será cortar la forma que más te apetezca que tenga tu pendiente.
A continuación limamos los bordes para que queden lisos.
Después con la chincheta haremos el agujero para meter nuestra anilla y sujetar el pendiente.
Una vez hecho esto, cubriremos el cuenco con el film de plástico y lo llenaremos de agua templada. Le iremos echando dentro los colores de lacas de uñas tal y como nos apetezca.
Ahora introducimos el palo de la brocheta por el agujero del pendiente y lo "pintamos".
Dejamos secar 24 horas y finalmente montamos el pendiente.
Y hasta aquí por hoy. Espero haberos entretenido un ratito y os deseo muchísima salud y mucho ánimo.
¡Hasta el siguiente post!