Aunque nosotros no somos omnipotentes y, por tanto, no podemos controlar los astros para que siempre encuentres tus llaves, sí podemos aconsejarte lo siguiente: utiliza colores llamativos para que sean más fáciles de identificar. ¡Vamos allá!
Materiales:
Dos ovillos de lana.Argolla.
Tijeras.
Cinta adhesiva.
Peine dentado.
Paso a paso:
1. Pega la argolla a la superficie donde vas a hacer la manualidad para que no se mueva. Corta dos hilos de cada color y, doblados, anuda los cuatro a la argolla.Si quieres que quede como en la foto mantén el siguiente orden: color (a), color (b), color (b) y color (a).
2. Toma el hilo segundo empezando desde fuera y dale una vuelta al primero. Repite con el tercer y cuarto hilo y haz lo mismo con los otros cuatro.
3. Haz dos nudos con los hilos del medio. Repite los pasos dos y tres hasta terminar.
4. Cuando el llavero esté de la longitud que te guste toma un hilo y da vueltas a los demás, dejando uno con una pequeña abertura. Introduce el hilo con el que has dado las vueltas en la abertura y tira para cerrarla.
5. Pasa el peine por los hilos que sobren para deshilacharlos y corta para dejar la longitud que quieras. ¡Terminado!
Si prefieres verlo en vídeo, te lo dejamos aquÍ:
¿Y bien? ¿Te ha gustado, encantado, fascinado, enamorado? Nosotros respondemos 'sí' a todo. Si tienes ganas de descubrir otras (muchísimas) manualidades o donar tu saber sobre ellas a la humanidad, tu sitio está en nuestro Facebook. ¡Hasta otra!