Hola a todos y bienvenidos un día más. Ya estamos a miércoles y hoy es el día de los trucos. Este finde fuimos a la finca de la familia y aproveché para hacer un par de manualidades al aire libre, con ese sol de otoño que tanto me gusta.
Y sin más rollo empezamos.
Tenía yo por casa un par de botellas de cerveza que no sabía qué hacer con ellas y otra que me resultaba algo sosa, así que aprovechando la cuerda que me había sobrado de mi capazo hecho con salvamanteles decidí hacer algo chulo.
Los materiales son muy sencillos:
-Botellas de cristal
-Cuerda
-Cola blanca
-Pegamento con brillantina
-Papel film
-Tijeras
El procedimiento es muy fácil.
Yo primero suelo probar sin pegar para ver el resultado y elegir hasta donde quiero que llegue la cuerda, vamos que presentamos la manualidad y luego ya la hacemos.
En la primera botella decidí ponerla en la parte de abajo y rodear un trozo. El procedimiento fue muy sencillo; iba aplicando cola y poniendo la cuerda, apretando bien. La cola mancha bastante, o al menos a mí, pero luego se quita genial y no queda ni rastro.
No os preocupéis por lo sucio que se quita muy bien.
Para fijar la cuerda, porque es un poco difícil, yo opté por envolverla en papel film apretando bien fuerte.
Y lo dejé secar hasta el día siguiente pero eso es un poco a ojo.
Aquí envuelto secando
Las otras dos botellas las decoré de igual forma pero poniendo la cuerda en el cuello.
Además las adorné con un poco de brillantina. En la primera botella adorné el cuello y en las otras dos, las que eran de cerveza adorné la parte de abajo y un poco de arriba, para compensar pero intentando que no quedase recargado.
La brillantina queda chula
Como consejitos tras mi experiencia os diría que forréis la mesa con algo para que no se estropee. En mi caso es una mesa muy antigua, y no es buena ni mucho menos pero me da pena estropearla y le puse papel de cocina, pero puede ser hule, papel de periódico, cualquier cosa.
Y cuando terminéis hay que limpiar la botella porque como os digo más arriba la cola acaba rebosando y se mancha. Lo bueno es que se quita fenomenal.
La verdad es que es muy fácil de hacer y queda muy bien, podemos alegrar cualquier rincón. En mi caso yo puse un poco de lavanda en su interior y así de paso perfumé toda la estancia.
Y realmente esta es la manualidad, muy fácil, rápida y barata. Muchísimas gracias por leerme y nos vemos mañana con el post reflexivo.
Y a vosotros: ¿os gustan las manualidades hechas con cuerda?¿Y las botellas decoradas?
¡¡¡¡Hasta mañana!!!!
Fuente: este post proviene de Pequeños trucos para sobrevivir a la crisis , donde puedes consultar el contenido original.
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