Bueno, pongámonos a lo que hemos venido hoy... Una entrada especial, para un día especial...
Ya está cerca....casi no queda nada para Navidad. Unas fechas que cada año disfruto más por los niños. Con ellos las cosas se ven de otra manera y la ilusión está en cada cosa que hacen y ven. Así que es inevitable no contagiarse de sus ganas.
Me gusta preparar cositas para regalar. Siempre, pero en estas fechas es como si me lo pidiese el cuerpo. Un chute de energía y buenos momentos. Recuerdos y ganas de dar....de regalar porque sí.
Os dejo un DIY muy apañado y resultón por si os apetece regalárselo a vuestros invitados, amigos o conocidos. Yo los hice el año pasado y los puse en la mesa en las cenas de Nochebuena y Nochevieja. Cada invitado tuvo el suyo.
Qué necesitamos
Tarros de cristal con tapa
Papel pinocho de colores
Cuerda o cinta para atar y decorar los tarros
Tarjetas personalizadas con tu frase de felicitación
Pinzas decorativas
Para rellenar el tarro yo hice un bizcocho de naranja. Aquí podéis ver la receta.
No llenéis los tarros más de la mitad pues el bizcocho crece y puede salirse. Y recordad que el tiempo de cocción del bizcocho en el tarro es de unos 12 minutos. En cuanto saquéis el bizcocho del horno, tapar el tarro y cerrarlo con fuerza. Voltearlo y dejarlo enfriar boca abajo. De esta forma conseguiréis hacer el vacío. Y recordad a quien se lo regaléis que lo consuman pronto.
Dejar enfriar el bizcocho por completo antes de decorarlo.
Para decorar el tarro tenéis que cortar cuadrados de papel pinocho en función del tamaño del tarro. El papel tiene que cubrir la tapa y caer por los lados. Atar con la cuerda o cinta que elijáis. Recortar las tarjetas (no las hagáis muy grandes pues el tarro perdería protagonismo) y sujetarlas a la cinta con unas pinzas decorativas. Yo compré estas en una tienda de todo a 100 (a un euro ahora, o chino en su defecto). ¡¡Y listo para regalar!!