Este portacartas de zinc fue un flechazo. Lo encontré tirado de precio en una tienda de artículos low cost que todas solemos frecuentar, así que no lo dudé ni un segundo. Hoy os quiero enseñar cómo lo he decorado.
Me encanta el zinc, así que tal y como estaba me parecía precioso, y a punto estuve de dejarlo tal cual, o hacerle simplemente un efecto oxidado... pero también me parecía una pieza idónea para una transformación completa.
Portacartas de zinc
Este ha sido uno de esos trabajos en los que vas improvisando sobre la marcha. Tenía claras las tonalidades pero no qué zonas iba a pintar, si iba a utilizar papel o no... Por eso, esperando la inspiración, empecé por imprimarlo a esponja, con la que conseguimos no dejar ninguna marca. Después veréis que me podría haber ahorrado gran parte de este paso, pero es lo que tiene la improvisación!!!
Los bordes, laterales y el espacio para la placa de la dirección, los pinté, también a esponja, con una de mis pinturas favoritas, y que ya me habréis visto utilizar muchísimas veces: la pintura acrílica azul parís de Artis.
Aplicar imprimación y pintura acrílica a esponja
Revisando los papeles que todas almacenamos, encontré justo el apropiado, y la idea tomó forma enseguida. Forraría todo el frontal con él.
Papel de scrap
Al tener el portacartas el espacio destinado para la placa, y como era papel de scrap, tuve que hacer dos plantillas con papel vegetal: una para la parte superior y otra para la inferior.
Hacer las plantillas para las distintas zonas del portacartas utilizando papel vegetal. Después, trasladamos estas plantillas al papel de scrap
Mira que nos gusta complicarnos a veces. Con papel de arroz o servilleta esto no hubiera sido necesario, porque podría haber recortado fácilmente el papel alrededor de la placa con un cúter fino... pero ya se me había metido en la cabeza utilizar este y no iba a cambiar de opinión jajaja.
Por último, se adhiere el papel de scrap. En la imagen, la parte superior.
Y la parte inferior
Como sabéis, los papeles de scrap suelen estar decorados por ambas caras, así que forré los laterales del portacartas de zinc con el coordinado de la parte posterior. Después, sombreé todo el contorno con pátina de anticuario.
Forramos también los laterales del portacartas y sombreamos los bordes con pátina de anticuario
Y unos estarcidos para rematar ambos laterales.
Estarcidos en los laterales ya empapelados
Para disimular un poquito la unión del papel en las dos partes del frontal, hice otros estarcidos con una sencilla cenefa a ambos lados.
Estarcido en la zona de unión de las dos partes en las que hemos dividido el frontal
Con el espacio destinado a la placa de la dirección tuve serias dudas. Si tuviese buena caligrafía habría hecho algo bonito... el lettering es una de mis asignaturas pendientes.
Hasta que aprenda, un recorte de otro papel de scrap de escritura antigua me pareció la solución perfecta.
Otro recorte de papel de scrap para el lugar destinado a la dirección
Y ya os enseño el resultado final de mi portacartas de zinc decorado:
Por supuesto, está destinado a mi "guarida", mi mini taller. Aún no tengo clara la ubicación, así que os lo enseño sobre la maleta antigua que decoré hace tiempo (podéis volver a verla aquí).
También espera paciente su turno la cajonera de madera... entre otras muchas cosas. Si os enseñase la habitación completa os daría algo jajaja. Hasta la bandera pero bastante organizada... si no es así, me resulta imposible trabajar.
Nos vemos una semana más en los Findes Frugales de Marcela. Nos acompañáis? Para ver todas las propuestas, sólo tenéis que pulsar aquí.
Feliz fin de semana para todos y gracias por estar ahí!!!