Era joven, mucho más joven que ahora. Lo que voy a contarte hoy ocurrio en mi pre-adolescencia. Aún vivía con mis padres, y tenían la "maravillosa" costumbre de poner un alfiler en la boquilla del Super-Glue con la esperanza de que no se secara.
Esa manía, para una persona que se ha comido las uñas hasta los codos, era una trampa con muy mala leche. Llego el día en que necesité usar el pegamento, algo bastante habitual porque siempre he sido muy enreda, y...¡oh, problema a la vista! no tenia a nadie cerca a quien pedirle que me sacara el maldito alfiler, pero yo, muy decidida, encontré rápido la solución: sacar el maldito alfiler.....con mis dientes!ç
Madre del amor hermoso! Maldita la hora en la que tuve esa idea! Mis labios quedaron literalmente sellados, pero no fue el único desastre, del susto el pegamento se volcó y mancho ropa, mesa, suelo y todo lo que sus afiladas garras alcanzaron.
Pues bien, todo este drama se hubiera quedado en una pequeña anécdota si hace 17 años hubiera tenido en mi poder el nuevo limpia pegamento de Loctite. Con el puedes eliminar todo tipo de pegamentos en todo tipo de superficies: objetos mal pegados, mesas manchadas, dedos pegados.....
¡Me parece un inventazo! gracias Señores de Loctite, mi yo pre-adolescente os lo agradece enormemente.
Estos días, los chicos de de You Just Do, me han enviado una pack con el que preparar mis macetas para el buen tiempo. Un poco de picunela y el Perfect-pen de Locctite fueron suficientes. Aplicar el pegamento con este nuevo formato es realmente sencillo, incluso en objetos pequeños y con formas como en esta ocasión.
Ya tengo listas mis macetitas.
Ahora solo tengo que esperar al sol para ver crecer a mis pequeños girasoles.
¡FELIZ DÍA FLORECILLAS!
Muuuuuaks
Fuente: este post proviene de Mi silla azul by Lora, donde puedes consultar el contenido original.
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